Así,
estamos en los albores de una importante transformación: de la virtualización aplicada a la consolidación de servidores a la transformación de del CPD, y por tanto de la industria del software.
Maritz y cloud computing En este sentido, los últimos anuncios de VMware se enfocan en la posibilidad de configurar, testar y desplegar aplicaciones, consolidar servidores y emplear infraestructura bajo demanda para funciones propias del CPD como la recuperación frente a desastres.
Esta noción de cloud computing -donde las piezas se encuentran en el CPD o fuera de él- es precisamente hacia donde se dirige la industria del software: la idea de construir y correr aplicaciones en la web que se utilizan como servicios.
No en vano,
el nuevo CEO de VMware no es otro que Paul Maritz, quien fue directivo de Microsoft durante ocho años y que a finales de 2003 fundó la start-up Pi, adquirida por EMC a comienzos de año.
La principal actividad de Pi (Personal information) se basa en diseñar soluciones cloud computing que permiten controlar, compartir y publicar información almacenada en la web o en equipos locales. Al pasar a formar parte de EMC, Maritz también fue nombrado presidente de su división Cloud Infrastructure.
Lo que VMware ofrece ya con VMotion -la posibilidad de mover una máquina virtual de un servidor físico a otro- no tardará en aplicarse al concepto cloud computing, marcando uan nueva hoja de ruta para la virtualización.
Pero VMware no debe descuidarse, con o sin la influencia de Diane Greene. Las soluciones de virtualización open source -Xen, KVM, Virtuozzo, Virtual Iron- y Microsoft (con su nuevo hypervisor Viridian y la estrategia Dynamic IT) comparten la misma visión y ganan terreno a toda velocidad.