La respuesta del documento es clara: aunque los antivirus cumplen con su función en la mayoría de los casos, existen formas de evitar que un virus sea detectado, y todos ellos caen en esas pequeñas trampas.
Crear rutas de más de 255 caracteres, nombres de fichero en formato 8:3 o cambiar las extensiones de los ejecutables son algunas de las tretas que el autor del estudio, FraMe, de KernelPanik Labs, ha utilizado para probar la eficacia de 10 aplicaciones.
Entre ellas se encuentran las aplicaciones de las empresas más conocidas, como BitDefender, AVG, Avast, Panda, Norton, Nod32, o Kaspersky. El documento completo en castellano (40 páginas en un PDF de 2,7 Mbytes) está disponible a través de Kriptópolis. µ
vINQulos
Kriptopolis (vía Barrapunto)
El internet de las cosas (IoT) trae muchas ventajas, pero también comporta nuevos riesgos. El…
Ofrece hasta 1 millón de dólares de compensación económica en caso de incidente, con la…
Este cambio refleja los avances que se producen a nivel de infraestructura TI y el…
El evento espera reunir a 17.000 directivos, que podrán escuchar a medio centenar expertos en…
Como resultado de esta operación, ampliará sus servicios en el "bronze layer" del ciclo de…
Durante el segundo trimestre de su año fiscal 2025 acumuló 1.660 millones de dólares, la…