La UE investiga el monopolio en el negocio de libros electrónicos de Amazon

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La Comisión quiere determinar si Amazon viola las normas de competencia al exigir a los editores de ebooks que revelen los términos de sus contratos con los competidores.

La Comisión Europea ha puesto en marcha una investigación formal sobre los contratos de Amazon con los editores de libros electrónicos. La Comisión está particularmente interesada ​​en determinar si dichos contratos violan las normas de competencia al exigir a los editores que revelen los términos más favorables de las ofertas que hayan firmado con los competidores de Amazon.

La investigación deberá determinar si esos contratos promovidos por Amazon están perjudicando a los consumidores. Según CNET, la Comisión considera que la cláusula de Amazon podría hacer más difícil que sus competidores ganen espacio en el mercado de los ebooks, lo que, a su vez, perjudicaría a los consumidores.

Amazon ha desarrollado un negocio exitoso que ofrece a los consumidores un servicio integral, que incluye los libros electrónicos. Nuestra investigación no pone eso en cuestión. Sin embargo, es mi deber asegurarme de que los acuerdos de Amazon con los editores no son perjudiciales para los consumidores, dificultando que otros distribuidores de libros electrónicos puedan innovar y competir eficazmente con Amazon. Nuestra investigación mostrará si tales preocupaciones son justificadas”, manifestó la comisaria de Competencia de la UE, Margrethe Vestager.

Vestager dijo que las pesquisas se centrarán inicialmente en los ebooks en inglés y alemán, pero podrían expandirse a los títulos en otros idiomas. Su oficina ha señalado que todavía tiene que determinar si Amazon cometió alguna violación y no ha marcado un calendario para finalizar la investigación.

El regulador de la competencia en la Unión Europea ya lanzó una investigación similar sobre Apple en 2010, cuando, en un intento de mejorar su posición en el mercado de libros electrónicos con sus iBooks, Apple ofreció a los editores un contrato que les permitía determinar el precio de los libros electrónicos. Con ese sistema de fijación de precios, llamado “modelo de agencia”, los precios subirían y los editores podrían a su vez impulsar la venta de cada título.

Ahora la investigación se dirige a Amazon, sumándose a los problemas que la compañía de Jeff Bezos ya tiene en la UE. Amazon está siendo investigada por las autoridades europeas para determinar si las prácticas fiscales en su sede europea de Luxemburgo violan las leyes comunitarias.