La transformación de Intel ya está aquí

El Intel Developer Forum, celebrado hace un mes en San Francisco, ha reforzado el mensaje que el Intel lleva dando forma durante los últimos tiempos: se está transformando en un fabricante más versátil y más moderno para abrazar las tecnologías llamadas a cambiar la vida de las personas.

No era fácil después de décadas centrándose casi exclusivamente en chips para PC y servidores. Pero sí un paso que tenía que dar en su estrategia para dar respuesta a los –frenéticos- cambios que se avecinaban: La movilidad, la tecnología wearable, el internet de las cosas… y el irremediable estancamiento de las ventas de ordenadores.

Pero lo ha conseguido. Ahora sus mensajes se centran en entornos como la conducción automática, los drones, el emprendimiento a través IoT, la realidad fusionada, un mundo totalmente conectado, máquinas más inteligentes, interactivas y autónomas… Todo esto y más es lo que nos ha desvelado durante el Intel IDF 2016, probablemente la edición más rompedora en cuanto a novedades desde aquella primera cita celebrada en 1997. Todas ellas fueron desgranadas la semana pasada a la prensa por Álvaro García, director de Comunicación de Intel Iberia.

Buena parte de esta tecnología no existiría de no ser por su relación con los centros de datos, capaces de gestionar, unificar y centralizar la información de esos miles de millones de dispositivos conectados. Obviamente, su negocio en este importante segmento seguirá  inalterado, aunque con cada vez mayor presencia de sus micros basados en x86 Intel Xeon en detrimento de la arquitectura Intel Itanium. Norberto Mateos, director general de Intel para el Sur de Europa, nos comentaba que se mantiene la hoja de ruta para estos chips, pero también que x86 está cada vez más presente en procesos de misión crítica y que tarde o temprano será la arquitectura que predomine en el datacenter.

La 7ª generación de procesadores Intel Core, lista para la campaña de Navidad

Mientras todos estos avances llegan al mercado de forma masiva, Intel sigue desarrollando sus chips Intel Core, que ya se encuentra en su séptima gran actualización. Aquí convendría hacer un inciso acerca de su estrategia Tic Toc, aquella que combinaba ciclos de desarrollo de la microarquitectura x86 con los procesos de fabricación: un año avanzaba en nuevas especificaciones de chips y el año siguiente lo hacía a nivel de fabricación, de miniaturización de las obleas. De esta forma, cada dos años el mercado veía cómo llegaban chips completamente renovados. Más aún, Tic Toc siempre ha estado íntimamente relacionada con la famosa Ley de Moore. Pues bien, Intel ya ha anunciado que deja atrás esta estrategia debido a la dificultad de reducir  la integración de los circuitos por debajo de los 14 nanómetros.

Volviendo a la 7ª generación de procesadores Intel Core, Mateos declaraba durante el X Showroom de Intel en Madrid (el evento local donde anuncia los dispositivos que se podrán ver estas navidades en los escaparates de las tiendas) que estos últimos meses del año serán especialmente buenos para el sector. La mejoría económica en las empresas en términos generales ayudará a vender más ordenadores, principalmente los denominados 2 en 1. “Las organizaciones necesitan un cambio de ciclo en su parque de PCs después de algunos años de incertidumbre. Tanto esta nueva generación de chips como el sistema operativo Windows 10 ayudarán a mejorar los resultados para estas navidades”, añadía el directivo.

Por su parte, Simon Viñals, director de Tecnología de Intel Iberia, profundizaba en las nuevas capacidades de estos chips, especialmente a la hora de procesar gráficos y vídeo. Muy pronto llegarán las primeras unidades con gráficos Iris, diseñadas para reducir el consumo energético mientras se eleva la potencia a la hora de reproducir vídeo en 4K, una de las tareas cada vez más habituales en los momentos lúdicos de los consumidores.

En definitiva, el mayor fabricante de semiconductores a nivel mundial ha sabido transformarse a tiempo para seguir manteniendo ese liderazgo durante muchos años.