La tarjeta sanitaria comunitaria ya está a nuestro alcance
El principal objetivo de los Estados miembros es establecer medidas de prevención de la salud y planificar políticas sanitarias diseñadas para los 25 países de la UE.
El Gobierno español ha pedido la creación de un listado de prestaciones sanitarias básicas a las que pueda recurrir cualquier ciudadano europeo cuando esté de vacaciones o en viaje de trabajo. La medida iría acompañada de un fondo de compensación que atenuase el impacto económico de la medida en países como España, receptora de un gran número de turistas. Cerca de 12.000 personas han solicitado en España la nueva tarjeta sanitaria comunitaria desde su entrada en vigor el uno de junio. De hecho, este dispositivo permite el acceso a los sistemas sanitarios de los 25 países de la Unión Europea.
La implantación de la tarjeta sanitaria europea, que se ha presentado oficialmente en Madrid, es un paso decisivo para garantizar la continuidad asistencial a los pacientes aunque también es una herramienta esencial para justificar el reembolso de los gastos. Según la ministra de Sanidad, Elena Salgado, “España tiene un sistema universal de sanidad que afecta a todos los ciudadanos y ese es un aspecto que debe tenerse en cuenta”.
Dentro de este contexto, hay que subrayar que el debate de los ministros europeos de Sanidad pretendía analizar las últimas propuestas de la Comisión Europea para aumentar la cooperación entre los sistemas sanitarios y la posibilidad de tratamiento en otro Estado miembro. Sin embargo, la interconexión entre los sistemas nacionales plantea numerosas cuestiones de política sanitaria, como la calidad de la asistencia transfronteriza y su acceso a la misma, así como el alcance de la cooperación y la forma de conciliar las obligaciones nacionales con las europeas.
Con todo, el principal objetivo de los Estados miembros es coordinar toda la información sobre la epidemiología de las enfermedades cardiovasculares, y establecer medidas de promoción y prevención de la salud sobre todo entre los más jóvenes, y, asimismo, planificar políticas sanitarias.