La joint venture ST-Ericsson cerrará con 1.600 despidos
STMicroelectronics y Ericsson han anunciado que ponen fin a su empresa conjunta de chips móviles, dividiendo ciertas líneas de productos y empleados y cerrando otras.
Al no encontrar un comprador total para la joint venture ST-Ericsson, los fabricantes propietarios STMicroelectronics y Ericsson han anunciado que comenzarán a dividir los bienes de la compañía, un proceso que supondrá el despido de 1.600 empleados.
Esta es la última hora de ST-Ericsson, la empresa conjunta entre STMicroelectronics y Ericsson que trató de dar impulso al negocio de chips en Europa y que finamente se ha visto arrastrada por las circunstancias del mercado, como recoge Tech Crunch.
La historia se remonta al año pasado, cuando las dos empresas matrices decidieron plantearse movimientos estratégicos e iniciar el camino de la venta de la joint venture, fundada en 2009, tras perder cifras millonarias en el proceso de su actividad.
Después de llevar a cabo una revisión de operaciones y números, que comenzó en abril de 2012, parecía que Qualcomm podría comprar el negocio, pero no resultó así.
En el cuarto trimestre del ejercicio 2012, ST-Ericsson reportó unas ventas netas de 358 millones de dólares, pero una pérdida de operaciones por valor de 133 millones de dólares. La historia dio un giro más hace unos días, cuando se informó de que no había compradores para los activos completos de la firma.
Hoy los dos fabricantes han presentado un plan formal de cierre de la joint venture, donde detallan cómo se efectuará el reparto de los bienes en esta división efectiva.
Ericsson asumirá el diseño, desarrollo y venta de los productos LTE, incluyendo 2G, 3G y 4G. Por su parte, STMicro absorverá todos los demás productos, incluyendo parte de las áreas de montaje y pruebas, mientras las líneas restantes se cerrarán.
Todavía están buscando un comprador para su negocio de conectividad, que emplea a 200 personas, y para el que parece que pueda haber una oferta sobre la mesa.
Según las compañías, de las 1.600 personas que se despedirán en todo el mundo con el cierre de la empresa, poco más de un tercio son puestos en Europa. Ericsson se llevará a 1.800 empleados y contratistas, sobre todo en Suecia, Alemania, India y China. STMicro asumirá 950 trabajadores en Francia e Italia.