La guerra en el campo de los chips podría tener una batalla legal en la Unión Europea
GlobalFoundries ha pedido a las autoridades comunitarias que investiguen el comportamiento de su máximo rival TSMC.
El fabricante de chips estadounidense GlobalFoundries ha pedido a la Unión Europea que investigue a su rival taiwanés TSMC, ya que considera que ha actuado sin respetar las leyes de la competencia.
La empresa de Santa Clara ha acusado a TSMC de hacer un uso injusto de tácticas empresariales como descuentos de fidelización, cláusulas de exclusividad y descuentos por lotes, hasta la imposición de sanciones a sus clientes para disuadirles de que se cambien a a otro proveedor de chips.
Esas prácticas se llevan produciendo desde hace varios años, y han afectado a la capacidad de GlobalFoundries para competir en el mercado, indican en la compañía.
Además, denuncian que las tácticas de TSMC en esos temas se volvieron más intensas después de que un nuevo producto de GlobalFoundries comenzara a ganar nuevos clientes.
Desde TSMC han destacado que “nuestros clientes siempre tienen libertad para elegir, algo que respetamos profundamente, y nos eligen por el valor que les proporcionamos a la hora de lograr el éxito en el largo plazo”.
En el gigante taiwanés también apuntan que “las acusaciones no tienen base alguna” y avisan de que “defenderemos de forma enérgica la reputación y confianza que tanto nos ha costado ganar”, recogen en Reuters.
Por último, destacar que GlobalFoundries y TSMC son los dos ‘players’ más importantes en el suministro de chips a empresas que no tienen plantas de producción propia.