La comunidad Internet creció un 20 por ciento en 2002
Según un informe de la UNCTAD, el acceso por banda ancha puede cambiar
la forma en que los particulares y las empresas utilizan el medio
electrónico.
El número de usuarios de Internet en todo el mundo ascendió a 591
millones a finales de 2002, aunque la tasa anual de crecimiento
descendió al 20 por ciento, siete puntos menos que doce meses antes,
según el Informe sobre Comercio Electrónico y Desarrollo 2003,
presentado en Ginebra por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre
Comercio y Desarrollo (UNCTAD).
Por continentes, las cifras son
muy dispares, oscilando entre los más de 200 millones de internautas de
Asia y América, pasando por los 166 millones de Europa, hasta los casi 8
millones de África. Así, a finales del pasado año los países en
desarrollo contaban con una tercera parte de la comunidad internauta,
con un crecimiento del 40 por ciento con respecto a 2001.
La
UNCTAD señala que el acceso por banda ancha puede acelerar el tráfico y
cambiar la forma en que los particulares y las empresas utilizan
Internet. De este modo, pone de manifiesto que los abonados de alta
velocidad es más probable que participen en el comercio electrónico y,
respecto a las empresas, afirma que puede reducir el coste de las
conexiones individuales, un aspecto importante para las pymes.
Respecto al comercio electrónico dirigido a particulares (B2C), éste sigue
representando una parte reducida de las cifras totales de comercio al
por menor (en torno al 1,5 por ciento en Estados Unidos y la Unión
Europea). En 2002, las estimaciones de ventas B2C en Estados Unidos
sumaron 43.470 millones de dólares, frente a los 28.290 millones de la
UE, 15.000 millones en Asia-Pacífico y 2.300 millones en América Latina.
En cambio, las cifras del B2B (entre empresas) ponen de relieve el predominio
de este tipo de transacciones en el comercio electrónico total,
alcanzando en Estados Unidos el 93 por ciento del total en 2001. Por su
parte, en la UE el B2B movió en torno a 200.000 millones de dólares
durante 2002.
Por contra, el informe señala que la mayoría de los
países en desarrollo se enfrenta a limitaciones para ampliar su economía
electrónica principalmente debido a sus bajos niveles de ingresos,
reducidas tasas de alfabetización, falta de sistemas de pago y
resistencia cultural a ese tipo de comercio.