En concreto, la tecnología exascale es capaz de alcanzar una velocidad 1.000 veces mayor a la petaflop, que está presente en los superordenadores más rápidos del planeta.
En cualquier caso, Borkar es de la opinión de que por el momento Intel no podrá sacarle todo el partido posible al invento, ya que todavía se necesitan solucionar algunos problemas relativos al consumo de energía.
En ese sentido el objetivo es llegar a construir un equipo exaescala que presente un gasto pequeño de energía, a poder ser en torno a los 20MW.
Además, el ejecutivo de Intel ha señalado que la tecnología exascale tiene un futuro muy prometedor.
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