La codificación asistida por IA se vuelve universal

La inteligencia artificial (IA) es, al mismo tiempo un aliado y una amenaza para la industria de la seguridad. Tanto los investigadores como los ciberdelincuentes se apoyan en esta innovación tecnológica para reforzar sus herramientas.

De acuerdo con el informe sobre el “Estado de la seguridad nativa de la nube” de Palo Alto Networks, al menos 2 de cada 5 profesionales de la seguridad prevén que las amenazas basadas en IA serán capaces de sortear las técnicas tradicionales de defensa y acabarán convirtiéndose en el vector de amenaza más común.

El 38 % de las empresas incluye los ataques impulsados por esta tecnología entre las principales preocupaciones en seguridad cloud.

Uno de los frentes en los que se abre un desafío es en el desarrollo de software. El 100 % de las empresas ha adoptado ya la codificación asistida por IA para el desarrollo de aplicaciones. Así lo destacan los autores del informe, que dicen que, “por primera vez en la historia, los encuestados de este estudio respondieron de forma unánime en todo el mundo asegurando que se encuentran en plena adopción” de dicha codificación asistida por IA.

Esto lleva al 47 % de los profesionales de seguridad a poner el ojo sobre los riesgos asociados al código que se genera de esta forma. Y es que el rápido ritmo de desarrollo y la falta de supervisión humana podrían conllevar nuevas vulnerabilidades.

Hasta 7 de cada 10 encuestados por Palo Alto Networks achacan la introducción de vulnerabilidades a unos despliegues precipitados.

Según 1 de cada 3 empresas, los rápidos cambios tecnológicos impactan en la expansión de la superficie de ataque. A la pregunta de qué cambiarían si tuviesen que repetir la mudanza a la nube, como si fuera la primera vez, la mitad asegura que destinaría más tiempo a refactorizar las aplicaciones en vez de acometer una migración con modificaciones mínimas.