La accesibilidad, asignatura pendiente de las páginas web
No cumplir con el mínimo de contraste de color es el error más extendido de todos.
La accesibilidad en el desarrollo web debería ser una prioridad para compañías y Administraciones públicas. En el mundo hay unos 1300 millones de personas con discapacidad y un mal diseño impide que puedan disfrutar como el resto de contenidos y servicios online.
Un informe de WebAIM desvela que un 96 % de las páginas no es accesible. ¿Los principales problemas? Un bajo contraste de color (83,6 %), imágenes sin descripciones (58,2 %), enlaces vacíos (50,1 %), inputs sin etiquetas (45,9 %), botones vacíos (27,5 %) y no incluir el idioma en el tag HTML (18,6 %).
Todos estos “errores implican que no se ha tenido en cuenta la accesibilidad en el ciclo de desarrollo, pero lo positivo es que son fácilmente solucionables”, apunta Luis Calvo, líder del Equipo de Desarrollo Front en la española Paradigma Digital, que recuerda que en verano de 2025 las empresas europeas tendrán que cumplir por ley en materia de accesibilidad.
Para ponerse al día, Paradigma recomienda recurrir a la documentación de WAI (Web Accesibility Initiative) para formarse en desarrollo y diseño. Esta iniciativa también ofrece una librería de componentes accesibles. Además, se pueden usar herramientas de testing como Axe y Pa11y y las devtools de los navegadores para comprobar el grado de accesibilidad.
Teniendo en cuenta que “sólo el 30 % de los errores de accesibilidad se detectan de manera automatizada”, Luis Calvo, añade que esto “siempre se deberá combinar con testeos manuales“.
En la actualidad, el sector retail es el que comete más errores en accesibilidad web. Pero incluso el sector público debe mejorar en este aspecto y eso que “las páginas web de las Administraciones públicas están obligadas por ley a ser accesibles” y “se arriesgan a multas de la Unión Europea o a perder las subvenciones que vienen de Europa”, tal y como advierte Calvo.