Nuevo frente judicial en la industria tecnológica después de que Kaspersky Lab haya presentado ante la Unión Europea y el regulador alemán que lleva temas de competencia, una demanda contra Microsoft.
En concreto, la compañía moscovita acusa a Microsoft de abusar de su posición dominante en el mercado de sistemas operativos para PCs, generando obstáculos para los vendedores independientes de software de seguridad.
Desde Kaspersky consideran que no es admisible la estrategia de Microsoft, que distribuye su software de antivirus Defender con todos los sistemas operativos Windows, recogen en Reuters.
Además, indican que la conducta de Microsoft implica un menor nivel de protección para los usuarios de Windows, una limitación en su derecho para elegir, y pérdidas financieras, tanto para los usuarios como las empresas responsables de soluciones de seguridad.
La respuesta de la empresa de Satya Nadella ha sido contundente, asegurando que no han violado ninguna ley, y explicando que confían en que las funciones de seguridad que lleva Windows 10 respetan las leyes de competencia.
La batalla judicial llega después del fracaso de las negociaciones entre Kaspersky y Microsoft, en un intento por llegar a un acuerdo que evitara pasar por los tribunales.
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