Japón prohíbe el programa piloto de Uber para compartir coche
A pesar de que hasta ahora había una buena relación entre Uber, el gobierno japonés y su gremio de taxistas, la situación podría cambiar con un nuevo programa piloto que ya se ha prohibido.
A diferencia de su sistema en España, Uber entró en Japón colaborando directamente con los taxistas. Su aplicación no funciona directamente como un sistema para contratar vehículos privados ni taxis propios, sino más bien como una especie de “agencia de viajes” que permite contratar taxis oficiales en las que el taxi cobra su tarifa y Uber una comisión.
Además Uber dispone en Japón de servicios especiales para taxis “de lujo”, incluyendo también limusinas, todo ello con vehículos oficiales en los que los conductores disponen de licencia.
Los problemas de Uber en Japón han comenzado con su su nuevo programa piloto, que plantea la posibilidad de que los usuarios puedan compartir coche, en teoría no contratar un vehículo privado. El matiz está en que hay pagos de por medio, por lo que no está claro que tipo de servicio están ofreciendo, ya que Uber ha expresado que se trata de un programa piloto en el que, según ellos, pagan a los conductores por los datos, no por los viajes en sí.
El servicio, que había comenzado en la ciudad de Fukuoka, ha sido prohibido directamente por el ministro de transporte japonés, ya que Uber no cuenta con licencia en el país para operar un negocio de transporte comercial, y las explicaciones de Uber no parecen convencerles para quitar la prohibición
Según el propio CEO de Uber, las leyes y regulaciones son complejas, por lo que no descartan a pesar de este revés, seguir trabajando para poder implementar este nuevo servicio en el país del Sol naciente.