“Internet es hoy lo que es gracias a quienes sufrieron el estallido de la burbuja puntocom y permanecieron trabajando”

-¿Qué modelo de teléfono utilizas?

Un iPhone 4.

-¿Ordenador o tablet?

Ordenador. Hace poco me compré un netbook para los viajes, estuve dudando entre el tablet y el netbook y me decidí por el segundo. Los tablets también me gustan, pero son más para consumir contenidos que para generarlos.

-¿De qué dispositivo no te desprenderías nunca?

Del smartphone, me he acostumbrado a estar siempre conectada y me costaría muchísimo renunciar a tener acceso a la información en cualquier momento.

-¿Mejor invento TIC de la historia?

El mejor ha sido Internet, que nos ha dado acceso a grandes flujos de información y conocimiento. Nos ha permitido conectarnos, conocer nuevas ideas, personas, puntos de vista diferentes…

-¿Qué redes sociales usas?

Por trabajo utilizo casi todas las que existen, pero mis favoritas, a las que más partido profesional les saco, son LinkedIn y Twitter.

-¿A quién admiras en el mundo TIC, y por qué?

A todos los emprendedores que sufrieron el estallido de la burbuja puntocom en 2001 y permanecieron trabajando y desarrollando la sociedad de la información. Soportaron unos años muy duros, pero gracias a ellos Internet es hoy lo que es.

-¿Cuál fue tu primer empleo?

El primero fue de canguro, cuidando niños por las noches. Tenía 17 años y llamaba constantemente a mi madre para preguntarle lo que tenía que hacer. El primero relacionado con mi carrera profesional fue en Recoletos (hoy Unidad Editorial), de ahí conservo algunos de mis mejores amigos y grandes aprendizajes.

-¿En qué empresa te gustaría trabajar (que no sea la tuya)?

En cualquiera que esté liderando la transformación de su sector gracias a las nuevas tecnologías.

-¿Cuál es el mejor consejo de negocios que has oído?

No te hagas trampas al solitario.

-¿Qué es lo que más valoras en un empleado?

La proactividad y el sentido común.

–¿Cuál es tu mayor logro? ¿Y tu mayor fracaso?

Ambas son distintas caras de la misma moneda. Decía Charles Dickens que “cada fracaso enseña al hombre algo que necesitaba aprender”. Así que creo que mi mayor logro ha sido superar los momentos difíciles siendo fiel a mí misma y extraer aprendizajes de las experiencias vividas.

-Si no fueses directiva de Antevenio, ¿qué te gustaría haber sido?

A nivel aspiracional, me gustaría haber sido corresponsal en los Estados Unidos.