La digitalización ha supuesto una auténtica revolución en muchos ámbitos de la sociedad, y la inteligencia artificial (IA) es una de las tecnologías que más está impulsando esta transformación. A pesar de que la IA tiene ya más de 60 años de historia es ahora cuando se está experimentando su mayor índice de popularidad gracias a desarrollos como ChatGPT, lo que está provocando un importante incremento en las ofertas de empleo vinculadas a la IA.
De acuerdo con los datos de Job Market Insights, las ofertas de empleo relacionadas con la IA registraron en 2022 un aumento del 31 % respecto al año anterior, alcanzando casi las 1.500 ofertas en el mercado digital de empleo español. Estas cifras confirman el despegue de la IA y auguran un futuro con una gran cantidad de empleos emergentes en este ámbito.
No obstante, también es cierto que la IA presenta grandes retos para las empresas, como son el propio ritmo vertiginoso de los cambios, la necesidad de adaptación y aprendizaje continuo de los equipos o la ciberseguridad. Además, según el informe de McKinsey “The future of work after Covid-19”, hasta 5 millones de empleos están en riesgo de desaparecer por la automatización en España.
En cualquier caso el saldo de la digitalización y la automatización será, en general, positivo, ya que desaparecerán aquellas labores más monótonas, peligrosas y sucias, mientras que surgirán muchas otras en las que será necesario el aporte humano. De hecho la IA está poniendo cada vez más en valor la capacidad de pensar de forma crítica y aportar perspectiva humana y ética, lo que brinda grandes oportunidades laborales a profesiones relacionadas con la filosofía, la educación o la ética, entre otras.
Por otro lado es importante tener en cuenta que la tecnología es desarrollada por personas para las personas, y el desarrollo de la IA demanda ya la existencia de equipos mixtos que combinen la parte más técnica con las disciplinas más humanistas. Los aspectos culturales, sociológicos y políticos son los que condicionan los algoritmos, no la tecnología, por lo que la IA, con el marco normativo adecuado, puede ayudar a solucionar problemas relacionados con la discriminación y promover una sociedad más justa.
Para liderar la innovación en IA y aprovechar todas las oportunidades que esta tecnología ofrece, es necesario llevar a cabo acciones a gran escala, como la reforma educativa, la creación de empleo, el fomento del emprendimiento, el desarrollo de las infraestructuras o la creación de entornos donde convivan la IA y la inteligencia humana (IH) y se erradiquen las desigualdades. Es en estos ámbitos donde hay que poner el foco para aprovechar al máximo las oportunidades que ofrece la digitalización y la automatización, y para que la IA se convierta en una herramienta al servicio de las personas y de la sociedad en su conjunto, según expone Mónica Pérez, directora de Comunicación y Estudios de InfoJobs.
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