La inteligencia artificial es la tecnología en la que más confían los españoles

La eclosión de la inteligencia generativa, con ChatGPT a la cabeza, ha hecho que muchos expertos y empresarios relacionados con la industria tecnológica adviertan acerca de los riesgos que conlleva un crecimiento descontrolado de la inteligencia artificial.

Hace algún tiempo ya hablábamos de que el desarrollo de una inteligencia artificial explicable, ética y responsable sería uno de los grandes desafíos tecnológicos de los próximos años.

Sin embargo, parece que los españoles creemos más en las ventajas que nos puede traer esta tecnología que en los riesgos que puede acarrear. Al menos así se desprende del informe ‘Feel IT: I Estudio Evercom de percepción tecnológica’, según el cual el 66% de los españoles encuestados ve la inteligencia artificial con ‘ilusión o expectativas positivas’, por delante de tecnologías como el metaverso (49,7%), el análisis big data (45%) o las criptomonedas (39,5%).

Además, las criptomonedas son la tecnología que genera más desinterés (23,7%) y miedo (15%); mientras que el big data es la que produce más incomprensión entre los consultados (29%).

Al ser preguntados por cuál de estas cuatro nuevas tecnologías creen que tendrá un impacto más positivo, el 56,5% de los encuestados respondió que la inteligencia artificial, muy por encima de las criptomonedas (16%), el metaverso (13%) y el análisis de big data (6,7%). Cabe destacar que un 7,8% considera que ninguna de ellas tendrá un impacto positivo.

Evercom pone el acento en la paradoja que supone que las criptomonedas sean la segunda opción en este ranking, pese a ser la nueva tecnología que más miedo o rechazo provoca. Considera que podría explicarse por el entusiasmo de las personas que las apoyan.

El informe también descubre que las consecuencias del uso de las nuevas tecnologías que más preocupan a los españoles son la destrucción o precarización del empleo (30,8%), la deshumanización generada en la sociedad y la pérdida de privacidad (28,3%, en ambos casos) o la desigualdad (12%).

Respecto al impacto directo en el empleo, más de la mitad (53,9%) considera que es negativo o muy negativo. De hecho, piensan que destruirá más puestos de los que generarán o que precarizarán los actuales. Apenas el 17,7% opina que su impacto será positivo o muy positivo, creando más empleo del destruido, generando oportunidades cualificadas o mejorando las actuales.

En cuanto a las repercusiones de las nuevas tecnologías en las conexiones humanas y la comunicación personal o laboral, el 47% considera que es negativo o muy negativo, complicando las relaciones interpersonales o distanciando a sus usuarios. Por el contrario, el 29,1% opina que es positivo o muy positivo.

El estudio también analiza la percepción que tenemos respecto a las grandes empresas tecnológicas, como Google, Amazon, Microsoft o Apple. En general, la percepción que se tiene de ellas se mantiene (46,2%), aunque ha mejorada en el 36,2% de los casos. En sentido opuesto, la consideración ha empeorado para el 17,7% de los consultados.

Los aspectos que más preocupan de estas empresas son su impacto en la privacidad de los usuarios (24,3%), el poder y tamaño acumulado por dichas empresas (22,3%), la precarización del empleo (21,3%), las prácticas comerciales perjudiciales para el usuario, como la obsolescencia (16,5%) o el impacto negativo en la salud mental o cuestiones relacionadas con la falta de desconexión digital (15,7%).