Intel presenta un 1Q estable con ambiciosos objetivos en tablets y ‘wearables’
La compañía de chips se ha visto beneficiada por la salud de su unidad de servidores y la “estabilidad” del mercado de PC.
Intel ha presentado unos resultados estables. Las cuentas del primer trimestre fiscal de 2014 que acaba de presentar han superado las estimaciones de los mercados. Las acciones de la compañía escalan en la sesión de preapertura un 1,08%.
Stacy Smith, CFO de la compañía, ha calificado los números como “un buen comienzo de año”. El mercado de PC se está estabilizando, favorecido en gran parte por el fin de soporte de Windows XP.
Intel ha estado dentro de 5 millones de tablets vendidos durante el primer trimestre del año y se ha marcado el objetivo de llegar a los 40 millones de unidades al cierre de 2014. La compañía está aún lejos de sus competidores pero confía en la fuerza de la unidad gracias a los acuerdos que ya ha firmado con pesos pesados como Lenovo, Asus, Foxconn y Acer.
Norberto Mateos, máximo responsable de Intel para Iberia, considera ante las cámaras de Silicon News que es un objetivo ambicioso. Intel acaba de entrar en la industria móvil; vendió 10 millones de tablets en 2013 y los objetivos marcados cuadruplican la cifra; esto supondrá una cuota de mercado de entre un 15-20%.
Los ingresos durante los últimos 3 meses han ascendido a los 12.760 millones de dólares, un 8% menos que durante el mismo trimestre de 2012. Los beneficios netos han sido de 1.900 millones de dólares, un 5% menos de año en año, pero superiores a las expectativas de los mercados.
La unidad de mercado Business, la responsable de los chips para PC ha ingresado 7.900 millones de dólares, un 1% menos que el año pasado. La división de Centros de Datos ha aumentado un 11% sus ingresos hasta los 3.100 millones de dólares. El giro estratégico de Intel da prioridad a la unidad de servidores; la inversión de 740 millones en Cloudera así lo demuestra.
Por primera vez, Intel ha desglosado los resultados de la unidad Internet of Things, que ha contribuido a las cuentas generales con 482 millones de dólares. También es una de las áreas que más quiere reforzar la compañía. La compra de la compañía Basis Intel ha demostrado, dice Mateos, “el compromiso que tiene Intel hacia el wearable computing”.
El objetivo es que esta unidad genere 2.000 millones de dólares a final de año.
Preguntado sobre posibles nuevas medidas asociadas al plan de reestructuración en marcha, que ha conllevado el cierre de plantas como la de Costa Rica o el Centro de Investigación de Barcelona, Mateos asegura que no hay más noticias.
“La compañía está cambiando su paso y dirigiéndose a nuevos segmentos”. Estos cambios, sigue, implican “reorganizaciones estructurales” y la búsqueda de más eficiencia lo que “implica hasta cierto punto la reducción de gente”, ha explicado.