Intel pretende llevar las grandes redes inalámbricas a todo el mundo
Ninguna localidad española ha sido incluida por ahora en el proyecto “Comunidades Digitales”, en el que colaboran IBM, Cisco, Dell y SAP.
Intel ha lanzado junto a compañías como Dell, Cisco, IBM o SAP el proyecto “Comunidades Digitales”, con el que pretende llevar las redes inalámbricas de largo alcance a unas 100 ciudades de todo el mundo antes de año y medio. Entre los 13 proyectos piloto ya en marcha hay sobre todo ciudades de EE UU y ninguna de España, donde la incursión de las administraciones públicas en este campo ha sido llamada al orden por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones.
El mayor fabricante mundial de procesadores trabaja desde 2003 en la promoción del uso por parte de las administraciones locales de las redes WiMax, un sistema de comunicación sin cables que permite el envío y recepción de datos a larga distancia, hasta 50 kilómetros. Desde entonces ha favorecido su extensión colaborando con varios ayuntamientos en la creación de redes inalámbricas, auque ha revelado que espera extender sus acciones en este campo.
“Estamos trabajando para obtener los mejores beneficios de las tecnologías inalámbricas (…), que incluyen menores costes operativos, mayor seguridad pública y una base para el crecimiento y la competitividad”, afirma Chandrasekher, vicepresidente de la división de ventas de la compañía estadounidense.
La creación de redes inalámbricas por parte de las administraciones no está exenta de polémica, principalmente porque las operadoras temen que se permita que estas infraestructuras ofrezcan conexiones gratuitas a Internet a todos los ciudadanos.
En España, que no ha sido incluida en los proyectos piloto de esta iniciativa, los problemas son similares. En 2003 la Comisión del Mercado de Telecomunicaciones advertía de que la realización de actividades de establecimiento y explotación de redes y prestación de servicios de telecomunicaciones de forma gratuita podría “producir distorsiones a la libre competencia en el acceso a Internet y en la explotación de redes públicas de telecomunicaciones”. Más recientemente, proyectos iniciados por los municipios de Barcelona y Atarfe recibieron la sanción y clausura del organismo regulador.