Intel avanza en ‘wearables’ con Curie, un módulo de hardware que parece un botón
La compañía de Santa Clara también está aprovechando el International CES para hablar de temas como la identificación de usuarios sin contraseñas y una mayor diversidad de plantilla.
La gran feria sobre electrónica de consumo International CES sigue su curso en Las Vegas y, como es lógico, se precipitan las presentaciones de productos.
Una de las keynotes que ha tenido lugar durante las últimas horas es la de Intel, que ha corrido a cargo de su CEO, Brian Krzanich. Durante su intervención, el directivo recalcó que la existencia de “nuevas experiencias de computación personal, dispositivos inteligentes y conectados, y la revolución wearable están redefiniendo la relación entre los consumidores y la tecnología”.
“Nuestro objetivo con la tecnología de Intel es ayudar a resolver problemas reales”, continuó, “y permitir experiencias realmente deseadas por personas y empresas”.
Una de las soluciones tangibles que ha planteado esta compañía lleva el nombre de Intel Curie y es una pieza de hardware que se enmarca directamente dentro del segmento de la wearable technology. Y lo hace, claro está, con un tamaño bien reducido que le permita avanzar en este tipo de innovaciones, comparable al de un botón.
Se basa en la arquitectura Intel Quark SE y, si todo va según lo previsto, debería hacer acto de presencia en el mercado a partir de la segunda mitad de 2015.
Por esas mismas fechas, o hacia finales de año más bien, esperamos ver el fruto de la colaboración de Intel con el fabricante de gafas Oakley. Sus equipos, al combinar esfuerzos, quieren desarrollar gafas de lujo que puedan aportar alguna que otra ventaja a los deportistas.
Aunque, obviamente, esto no es lo único en lo que trabaja la compañía de Santa Clara. Otros de sus proyectos son las cámaras RealSense incorporadas en gadgets como robots o drones, la identificación libre de contraseñas a través de True Key y el reconocimiento facial o de huellas dactilares y la propia impresión 3D, donde avanzará de la mano de HP.
Otra iniciativa que merece la pena ser destacada, ya a nivel humano, es aquella que recibe el nombre de Diversidad en la Tecnología y que intentará equiparar la representación de hombres y mujeres, así como impulsar a quienes ahora son una minoría, dentro de la plantilla de Intel.
Esto debería ocurrir en el plazo de unos cinco años y cuenta con una inversión de al menos 300 millones de dólares.