Instagram pidió 2.000 millones de dólares a Facebook por su compra
Las negociaciones entre su CEO, Kevyn Systrom, y Mark Zuckerberg redujeron la cantidad finalmente a la mitad.
¿Son 1.000 millones de dólares una cantidad exagerada a pagar para comprar una compañía de solo un año y medio de vida y una docena de trabajadores en plantilla? Para el consejero delegado de Instagram, Kevin Systrom, no. En un primer momento, el máximo responsable de la aplicación fotográfica había solicitado a Facebook el doble para que la red social se hiciera con su empresa.
El diario americano The Wall Street Journal cuenta con pelos y señales los detalles cómo se produjo la compra. A diferencia de lo que han comentado otros medios, parece no había negociaciones previas y todo se concretó en menos de una semana.
Tras hablar con la COO de Facebook, Sheryl Sandberg, Mark Zuckerberg se puso en contacto por teléfono con Systrom el jueves 5 de abril y le manifestó su interés de hacerse con su start-up. Según cuenta el rotativo estadounidense, el fundador de la red social decidió hablar con él directamente en lugar de hacerlo a través de abogados (algo habitual en las operaciones de fusiones y adquisiciones) por miedo a una espantada de Systrom.
El CEO de Instagram se estuvo personando en la casa de Zuckerberg en San Francisco en los siguientes días a esa llamada para negociar. Mientras, el mandamás de Facebook calló ante la Junta de Administración de su empresa y no les dijo nada de la operación hasta el domingo 8 de abril. El miembro del consejo y capitalista Marc Andreessen (quien también había invertido 250.000 en la fundación de Instagram) casi les pilla con las manos en la masa.
Una de las bazas de Instagram era que la start-up estaba a punto de cerrar una inyección de capital de 50 millones de dólares que elevaría su valor a 500 millones. Systrom solicitó a Zuckerberg 2.000 millones de dólares nada menos en sus primeras negociaciones, cantidad que iría reduciéndose. Aunque el responsable era consciente de que su firma quizás no valiera tanto, también sabía el interés que tenía para Facebook. La llamada realizada por el mandamás de la empresa de Palo Alto, según pensaba el CEO de Instagram, era una muestra de la preocupación de Zuckerberg por una posible competencia tras el rápido crecimiento de Instagram. Systrom
Como bien señala Business Insider, la forma de actuar de Zuckerberg deja muy claro que sigue siendo el accionista mayoritario y el propietario de más acciones con voto y que va a seguir tomando las decisiones importantes en la organización a largo plazo.