IBM y Fujifilm consiguen el record de almacenamiento en cinta magnética: 580 Tb

La vieja tecnología de las cintas magnética continúa sorprendiendo por las capacidades de almacenamiento que es capaz de conseguir. Eso sí, con la pega de que el acceso a la información no es aleatorio (como en un disco duro) sino secuencial, puesto que la bobina debe avanzar o retroceder hasta el punto concreto donde se encuentre el dato necesitado.

Aun así sigue habiendo usos para los que esta circunstancia no resulta un inconveniente y, a cambio, se valora la elevada capacidad de almacenamiento. Un ejemplo puede ser una copia de seguridad completa de una ingente base de datos en la que interese recuperar la totalidad de la información para trasvasarla a otro soporte o equipo.

Para usos tan particulares en IBM y Fujifilm tienen una buena notica, puesto que han logrado un récord mundial de densidad de almacenamiento al ser capaces de grabar 317 Gbpsi, lo que significa que en el espacio de una pulgada cuadrada se han grabado 317 Gb de información, equivalente a guardar 580 Tb en una única cinta magnética.

Antiguo pero no anticuado

Para conseguirlo ha sido necesario desarrollar un nuevo material que sirva de soporte a la cinta magnética, un compuesto de ferrito de estroncio (SrFE), capaz de proporcionar tan descomunal densidad de almacenamiento, que supera a las actuales de ferrito de bario (BaFe). Más allá del propio soporte, la propia tecnología servomecánica y los cabezales y controladores del lector/grabador también han tenido que evolucionar en consonancia. De hecho la cinta es capaz de girar a una nada desdeñable velocidad de 15 km/h.

El logro no ha sido nada sencillo y, además, es el fruto de muchos años de trabajo. Tantos como los 15 años que han transcurrido para que se logre este nuevo récord de almacenamiento en cinta magnética, una tecnología que nació a principios de la década de los 50 y que continúa ofreciendo un coste ínfimo al poner en relación los Gb almacenado con los euros necesario para el soporte.

Antiguo pero seguro

Otra ventaja, quizá inesperada, de la tecnología de las cintas magnéticas que muchos pueden considera obsoleta, tiene que ver con la seguridad de este soporte. Y es que un disco duro puede robarse y conectarse a cualquier otro ordenador, pero para leer una cinta magnética es necesario disponer también del lector de dicho soporte y del equipo asociado, que es algo que no está tan al alcance de cualquiera.

Desde IBM y Fujifilm no se ha facilitado información acerca de si en algún momento esta tecnología abandonará el laboratorio y pasará a tener una aplicación práctica, aunque probablemente en caso de que así sea para ce más factible que esté destinada a grandes centros de proceso de datos, instituciones gubernamentales, laboratorios y centros de investigación.