IBM también apuesta por tecnología SSD en sus servidores
El Gigante Azul está poniendo énfasis en las unidades de estado sólido, no sólo a nivel de hardware sino también de software.
La compañía IBM está comenzando a ofrecer unidades de almacenamiento en estado sólido (SSD) como opción en la última generación de servidores Power Systems.
De forma adicional también acaba de lanzar un nuevo conjunto de aplicaciones inteligentes para optimizar las ejecuciones de las bases de datos DB2 con esta tecnología de almacenamiento.
Como ya hemos comentado en anteriores ocasiones, las unidades de estado sólido siguen siendo más caras que los discos magnéticos tradicionales, pero tan sólo consumen la mitad de la energía y son capaces de llevar a cabo operaciones de Entrada/Salida entre 50 y 100 veces más rápido que los HDD convencionales.
Además, para obtener los mejores índices de rendimiento, los discos duros deben tener en torno a un 60% de espacio libre, mientras que en el caso de las SSD, pueden llegar al 80 o 90% de su capacidad sin que el rendimiento se vea afectado.
IBM ha indicado que los SSD y el software relacionado estarán soportados por todos los sistemas Power6 que comercializa la compañía, incluyendo los blades.
De hecho, este paquete de herramientas está especialmente diseñado para optimizar el uso combinado de SSD y HDD en cargas de trabajo específicas.
“Las unidades de estado sólido se conforman como una tecnología muy importante, pero no están llamadas a reemplazar completamente las unidades tradicionales, al menos a medio plazo”, ha indicado Charlie Andrews, IBM director de Infraestructura dinámica en IBM. También ha hecho referencia a los precios: “el coste de estas unidades sigue bajando poco a poco, pero siguen siendo aún muy caras. Sin embargo, lo que necesitan saber los clientes es si obtendrán el valor real de lo que están gastando”.
“El software desarrollado por IBM incluye un conjunto de herramientas que posibilitan a los clientes la migración, monitorización y el almacenamiento dinámico de los datos en las unidades SSD según sus necesidades”, apunta Andrews. “Esta solución permitirá, por tanto, que la mayoría de usuarios puedan disponer de entornos híbridos con los dos sistemas de almacenamiento”.
Por ejemplo, en los IBM Power Systems se incorpora una herramienta de balanceo de datos que posibilita que el administrador pueda mover los datos que más frecuentemente se utilicen a las unidades SSD, mientras que la información menos utilizada pueda ser almacenada en los HDD, donde no se requieren tiempos de respuesta tan bajos.
Estos sistemas están actualizados con unidades de estado sólido de 50 GBytes que consumen tan sólo 2,1 vatios.