Harrison Ford protagoniza “Firewall”
La última película de Harrison Ford, “Firewall”, estrenada este fin de semana, utiliza la seguridad informática como argumento.
Los protagonistas de la película son, por un lado Jack Stanfield (Harrison Ford), responsable de seguridad y quien ha diseñado los sistemas de un banco de Seattle. En el otro lado tenemos a Bill Cox (Paul Bettany) que pretende robar en el banco sin dejar pistas.
No queremos entrar aquí a explicar el argumento de la película, así que nos centraremos en analizar como aparecen reflejados los conceptos de seguridad informática.
Dejando de banda las fantasías propias de cualquier thriller cinematográfico, esta película muestra de forma realista por un lado el tipo de decisiones a las que habitualmente debe enfrentarse un profesional de la seguridad informática, actuando en todo momento con la cabeza fría y analizando los diversos indicios para conseguir una visión de conjunto del problema. En todo momento, ante los problemas que surgen trata de identificar medidas alternativas y en aquellos momentos que debe escoger, trata de identificar el principal problema y se olvida del secundario.
Desde el punto de vista tecnológico, en una de las primeras escenas vemos a Jack Stanfiled y uno de los empleados del banco analizando un ataque remoto que está recibiendo el banco. Para solucionarlo, escriben una ACL en un router indicando que con ello se consigue lentificar el tráfico del atacante. Si bien este método puede llegar a ser efectivo, ningún analista de seguridad lo utilizaría: no tiene sentido delegar las decisiones de seguridad en la infraestructura de comunicaciones, con los posibles efectos que esto puede tener sobre otro tipo de tráfico, cuando se dispone de otros sistemas específicos de seguridad que nos dan más control.
Otro punto poco creíble es la utilización de una contraseña ridícula (el nombre del barco) en el sistema de seguridad del domicilio particular así como la extrema facilidad con la que se compromete la identidad de Jack Stanfield al inicio de la película.
No obstante, todas las pantallas de ordenador que aparecen en la película son autenticas representaciones de sistemas Unix, Cisco y Windows. Hasta los mensajes de correo utilizan programas estándar, lejos de la parafernalia y efectos especiales que tan habitualmente vemos. En la película predomina el software de Microsoft (Windows XP en las estaciones de trabajo), MSN Search para las búsquedas en Internet, Microsoft Operations Manager para ver el estado de la red. En los servidores, se utiliza exclusivamente sistemas Unix.
En conjunto es una película aceptable. Es la típica historia de thriller con final conocido antes de empezar la acción. Pero desde un punto de vista informático, es bastante más creíble y realista que la mayoría de películas de temático o contenido informático que he visto en los últimos años. Se trata, en definitiva, de una película que sirve para pasar el rato.