DE-CIX le pone número al tamaño que tendrán las conexiones submarinas entre continentes en tres años.
Según sus cálculos, habrá un total de 74 sistemas con algo más de 300.000 kilómetros de longitud. Para llegar hasta ese punto la inversión en las principales rutas submarinas será 8.800 millones de dólares.
Las interconexiones están creciendo y últimamente se están llegando a despliegues superiores a los realizados desde el boom del 2004 con sus 74.000 kilómetros de fibra. Y parece que el ritmo se acelerará.
DE-CIX explica que grandes hubs como Nueva York, Hong Kong y Frankfurt mantendrán su importancia estratégica. Y es que se prevé que la mayoría de las rutas de cable submarino que se creen llegarán hasta nodos que ya existen.
Eso no quiere decir que no se apueste por nuevos hubs. De hecho, también se espera crecimiento de los que se encuentran junto a puntos de agregación de esos cables. Es el caso de Lisboa y Marsella.
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