Hablemos con el coche
Los teléfonos móviles no son los únicos dispositivos “manos libres” que habrá en los vehículos.
Control de voz
Los teléfonos móviles no son los únicos dispositivos del coche. Radios, reproductores MP3, PDAs, reproductores de DVD y herramientas de navegación se están convirtiendo en elementos comunes dentro de los automóviles. Y esto significa también un incremento de botones, teclados y ruedas que hay que manejar mientras se conduce.
Obviamente, la seguridad y las leyes están forzando a los fabricantes de coches a buscar soluciones, como de hecho ya ha ocurrido con respecto al uso de los teléfonos móviles. Y una manera que han encontrado los fabricantes de que los usuarios mantengan las manos sobre el volante es que puedan decirles a esos dispositivos lo que tienen que hacer a través de controles de voz.
Cada vez hay más botones y más características en un coche y el futuro, según los analistas está en la capacidad de controlarlos todos a través de la voz.
Por supuesto, pasarán años antes de que la producción de vehículos incluya esta características, pero de momento parece que se empiezan a integrar a petición de los usuarios. Toyota, por ejemplo, se ha unido con una empresa relativamente desconocida, VoiceBox. Desarrollándose desde hace tres años, la tecnología de VoiceBox se diferencia de la de otros fabricantes porque permite a los usuarios hablar de manera familiar a los dispositivos, más que tener que memorizar comandos y sonidos. Por el momento, ambas compañías están desarrollando tecnologías de reconocimiento de habla para los coches de Toyota.
VoiceBox también se ha unido con Johnson Controls, uno de los grandes proveedores tecnológicos de la industria de la automoción. Uno de los primeros productor de este acuerdo es un nodo que permite a los usuarios buscar música en el iPod de Apple a través de la voz dentro del coche. Se espera que el producto esté disponible este año, por lo menos en Estados Unidos.
La tecnología
Los sistemas de navegación de los coches están empezando a ser cada vez más usuales. Aunque incorporar voz para las indicaciones, son pocos los que pueden manejarse a través de la voz y éstos, de manera muy limitada.
“El principal problema es que la mayoría de los motores de reconocimiento de habla no han sido muy fiables en el pasado”, comentaba Thilo Koslowski, vicepresidente de investigación del mercado automovilístico de Gartner.
Los motores de VioceBox pueden cambiar esto. La compañía fue fundada en 2001 por Bob Kennewick, un profesor de la Universidad de Harvard que estableció que el problema fundamental de los sistemas de reconocimiento existentes es que necesitaban programadores para establecer diccionarios específicos para un conjunto de datos y después ajustar lo hablado al texto. De esta forma, los usuarios tenían que decir la palabra correcta y si había ruido de fondo no se podía utilizar el sistema.
La visión de Bob Kennewick fue desarrollar una tecnología que pudiera reconocer el contexto de lo hablado, recogiendo las claves correctas de una conversación para responder como lo haría un humano. Por ejemplo, la petición: “Déjame oir a Cisco” podría ser traducido por la tecnología como una solicitud para escuchar al cantante Sisco, conseguir la cotización de la compañía Cisco Systems, o escuchar la canción “Cisco Spilling Station” de Johnny Cash (este ejemplo se ha llevado a cabo en Estados Unidos). La tecnología respondería a la petición pidiendo al usuario que escogiera una de estas tres opciones.
Por otra parte, la tecnología de VioceBox podría aprender con la experiencia reconociendo peticiones repetidas y respondiendo a peticiones personalizadas. Tendremos, por tanto, opción de poder gestionar toda la tecnología incorporada en un automóvil con nuestra voz. Un detalle muy demandado ahora que se empiezan a alzar voces contra el uso de sistemas de navegación GPS, que en más de una ocasión ha despistado al conductor.