La idea del gigante californiano es aprovechar ese terreno para construir un edificio con una superficie cercana a los 93.000 metros cuadrados que disponga de entre 7 y 11 plantas, y dejar espacio para oficinas, tiendas e incluso viviendas.
Los planes de Google parece que pasan por tener acabado el nuevo edificio en el año 2016, y supondrán el adiós de la compañía a sus actuales oficinas, que se sitúan en las zonas de Victoria y Holborn.
En cuanto a los costes de la operación, se habla de que la cantidad invertida podría situarse entre los 1.193 millones de euros y los 775 millones de euros.
Por último, recordar que Google ya tiene oficinas en propiedad en París y Dublín, y según parece, una de las razones que han motivado la medida de construir su propio edificio en Londres, reside en que si deciden repatriar los fondos de su negocio europeo a Estados Unidos, se verían obligados a pagar impuestos.
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