El plan del Primer Ministro británico, David Cameron, de crear un foco de desarrollo tecnológico en el Reino Unido empieza a tomar forma. Google planea hacerse con un edificio de siete plantas en la capital británica para ofrecer un espacio de trabajo para desarrolladores y “startups”.
La compañía de Mountain View dispondrá de un espacio de oficinas de más de 2.300 metros cuadrados hasta el año 2022 en los alrededores de Old Street, por el que pagará 7,8 millones de dólares en alquiler en 10 años.
El objetivo de la empresa es trabajar mano a mano con el gobierno británico para hacer de Londres un Silicon Valley a la europea, reconvirtiendo el modelo productivo del país. “El este de Londres ya es la sede de cientos de startups británicas innovadoras, y tiene un enorme potencial de crecimiento económico y creación de puestos de trabajo en los próximos años”, ha señalado David Singleton, director de ingenieros de Google UK, en un comunicado del que se hace eco el Financial Times.
Por su parte, el gobierno británico sigue animando a los emprendedores a instalarse en la llamada “Tech City”, un área comprendida entre Shoreditch y Stratford, en el corazón del área acondicionada para los Juegos Olímpicos de 2012.
Girará en torno a tres temáticas: desinformación, contrainteligencia y credenciales expuestas.
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