Esto implica que a partir de ahora se pueden ver distintas graduaciones de color para representar la vegetación y etiquetas para los diferentes terrenos representados, todo ello con el objetivo de que se puedan ubicar en los mapas los bosques, selvas, desiertos y cordilleras montañosas de todo el mundo.
En las imágenes inferiores puedes apreciar cómo se ven ahora los desiertos de Pakistán, la zona del Himalaya o las junglas de Laos.
Otro ejemplo lo vemos en la ciudad de Vancouver, en Canadá, donde se puede comprobar claramente el cambio al haberse añadido una representación de las zonas montañosas de los alrededores que acompaña al tradicional icono empleado para señalar una montaña.
En Google esperan que estos cambios mejoren las experiencia de los usuarios de sus mapas y les ayuden a planificar sus viajes o a informarse sobre una zona geográfica.
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