“Google es una compañía de ingenieros, los demás somos traductores”
La responsable de Comunicación y Asuntos Públicos de la firma en España ha hablado sobre el significado de innovación en Google.
Marisa Toro empieza su comparecencia con sensación de “inquietud”. La organización de Inspirational Festival 2012 que se celebra estos días en el céntrico Círculo de Bellas Artes de Madrid, le ha dicho que no se mueva de un punto exacto del escenario. Ya se sabe, por razones de iluminación.
Pero la ejecutiva, directora de Comunicación y Asuntos Públicos de Google en España, se queja de que la cegadora luz le impide ver las caras de las personas allí presentes. Quiere establecer contacto visual para hacerles una pregunta. “Quiero saber quién de vosotros utiliza Google como buscador”, pregunta. Inmediatamente, toda la sala levanta la mano.
“¿Y YouTube? ¿Y Gmail?”, aunque en menor grado, son muchas las personas que levantan sus manos.
Toro no quiere con esto evidenciar el gran éxito de Google. Es un ejercicio que le permite explicar “la enorme responsabilidad que tiene la compañía”. Una responsabilidad, expone, que se ha alcanzado gracias a la innovación.
Es precisamente esta, la innovación, la razón de ser de su speech y de su compañía. Google invierte 140.000 dólares anuales por empleado en I+D. Según las estimaciones de la OCDE la cantidad total que destina Google a este fin supera al gasto del conjunto de la UE.
Este ingente volumen de inversión no exime a Google de complicaciones. “Innovar es una tarea muy complicada”. ¿El secreto? “La magia del mundo tecnológico es aprender de quien tiene un producto en la mano”, revela. No basta con lanzar un dispositivo; la innovación empieza cuando hay fallos y el usuario pide mejoras.
Para Toro la palabra innovación significa muchas cosas. Le pone apellidos constantemente: innovación es evolución, innovación es una necesidad, es escuchar al usuario y a los empleados, es la creación de una plataforma abierta, es pensar en grande y empezar de cero, es no dejar de fallar nunca.
Innovación es en definitiva, el ADN de Google. Primero, porque es una compañía formada sobre todo por ingenieros. “Ellos son el alma, el corazón y el espíritu”, señala Toro. El resto de departamentos se limitan, admite, a “traducir lo que ellos hacen”.
La ejecutiva ilustra su discurso con los ejemplos más significativos de este esfuerzo en I+D. Son los coches que conducen solos, la iniciativa de los World Wonders Project y por supuesto, las Gafas Inteligentes.
¿Por qué hace Google todo esto?
“Nuestra razón de ser es conseguir ordenar toda la información en internet”, recuerda. “La preocupación es ahora convertir esa información en conocimiento”, explica Toro. Esto, cree, ayudará a cambiar el mundo, a hacer de él un lugar mejor y a “eliminar las barreras entre sociedades ricas y pobres”, añade.
¿Cuándo se alcanzarán los ambiciosos objetivos? “Me encantaría que la próxima vez que nos veamos la pregunta que haga al inicio sea ¿cuántos de vosotros compartís vuestras vidas con las gafas de Google?”.