La oficina de armonización del mercado
interior de la Unión Europea ha denegado esta semana al buscador Google el
uso de su marca de correco electrónico.
El buscador, que acaba de anunciar un impresionante crecimiento duplicando
beneficios, capital y plantilla, y es líder en áreas como las búsquedas online,
el desarrollo de software, de Internet, y de la publicidad on-line, ha visto
cómo se le escapa el uso de la marca en la Unión Europea, a favor de un
empresario alemán afincado en los Estados Unidos.
Daniel Giersch, registró antes
que Google una marca casi idéntica a la del servicio de correo del buscador. La
diferencia está solo en el guión:
G-Mail. Así, Google no podrá utilizar su
marca en la UE, porque podría confundirse con la del alemán, ya que se dedica
también a ofrecer servicios de correo electrónico.
La empresa estará obligada a usar un nombre algo más largo para su servicio
de correo, que en Europa se llamará Google Mail. El mismo nombre se viene
utilizando desde 2005 en el Reino Unido por una disputa similar.
Otra posibilidad para usar la marca en cuestión sería que Google mejorase la
oferta de 250.000 dólares (unos 192.000 euros) que ya había enviado a Giersch.
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