Gemma Muñoz (Ibermática): “Esto es una carrera de larga distancia, donde cuenta cada obstáculo que pasamos”

La directora del Centre of Excellence (CoE) de Ibermática considera que la visibilidad de la mujer en eventos tecnológicos y al frente de proyectos rompedores es vital para quebrar el ‘techo de cristal’.

“La tecnología y el big data han abierto nuevas oportunidades a especialidades que antes ni imaginábamos y las mujeres no podemos dejar pasar la oportunidad de formar parte de esto por unos estereotipos del siglo pasado”. Así de rotunda se muestra Gemma Muñoz, directora del Centre of Excellence (CoE) de Data Analytics & Artificial Intelligence de Ibermática, en esta entrevista enmarcada en nuestra serie ‘Women in Tech’.

Durante diez años, fue la CEO y cofundadora de la consultora El Arte de Medir, integrada en Ibermática el año pasado. Además, es la directora del primer máster en español de analítica digital, speaker en diversos eventos nacionales e internacionales y autora de cinco libros sobre big data analytics.

– ¿Cuál es su valoración sobre el papel de la mujer en las carreras STEM en España, particularmente en el sector tecnológico?

En mi opinión, el papel de la mujer en este tipo de carreras es fundamental, pero, lamentablemente, en el caso del sector tecnológico ahora mismo es insuficiente. Tras leer los resultados del estudio del Ministerio de Educación y Formación Profesional que se han publicado recientemente, podemos ver cómo la brecha de género en el sector tecnológico sigue aumentando, por lo que se confirma que tenemos que seguir invirtiendo nuestro tiempo y esfuerzo para revertir estos datos y hacer que las carreras universitarias y los módulos de formación profesional del sector sean considerados una opción igual de válida para las estudiantes de este país que carreras como medicina o química, donde el número de alumnas es muy superior.

Hace muchos años, en mi época de estudiante no había una mayor representación femenina, pero pensé que con el tiempo esta tendencia cambiaría. Me equivoqué. Creo que por eso debemos analizar qué podemos hacer los profesionales para dar a conocer todas las oportunidades a las que tienen acceso las alumnas españolas. No sólo las laborales, sino también de desarrollo personal y social. En España contamos con muchísimo talento y es una pena que no se logre apasionar a las jóvenes con la tecnología cuando es un sector con muchísima proyección en todos los sentidos.

– ¿Qué se está haciendo bien desde el ámbito universitario y formativo? ¿Y en qué iniciativas cree que queda más camino por recorrer?

Iniciativas como ‘Alianza Steam’, del Ministerio de Educación, o ‘Inspira Steam’, impulsada por la Universidad de Deusto, de las cuáles formamos parte desde Ibermática, están haciendo una gran labor para que las alumnas vean el sector tecnológico como otra opción mas que plausible a la que dirigir su futuro. Si bien es cierto que estas iniciativas son un gran punto de partida, los datos reflejan que todavía nos queda mucho trabajo por hacer. Y no sólo de las instituciones públicas y centros educativos, sino también por parte de las empresas y los profesionales que las conformamos. En Ibermática, por ejemplo, somos muchas las que en su día rompimos esa barrera y es importante animar a las próximas generaciones a seguir haciéndolo.

Desde mi experiencia, creo que esta labor de evangelización es fundamental. Y que además se haga desde los primeros estadios educativos. Por otro lado, en este aspecto existe un lado positivo, y es que nuestra mentalidad como trabajadores también ha cambiado en lo que respecta a la formación. Aunque en su momento escogieras una educación no tecnológica, ahora hay una gran oferta formativa con la que tenemos la oportunidad de elegir nuevas ramas. En el máster de Analítica Digital de Kschool que dirijo lo veo a diario. Son casos que deberían tenerse también en cuenta de cara a los datos.

No dejar pasar la oportunidad

– ¿Cuáles cree que son los perfiles de carreras donde hay más potencial y/o oportunidades para la mujer?

Sólo puedo hablar del área que conozco y, sin duda, las carreras denominadas de ciencias e IT son, en estos momentos, de las ramas dónde mayores oportunidades encontramos. Es más, actualmente no se está cubriendo la oferta laboral necesaria de nuestro sector y se prevé que esta situación siga en aumento en los próximos años. Cubrir estos puestos se está convirtiendo en una necesidad primordial para las empresas que empiezan a hacer frente a la transformación digital. Y para ello, necesitamos tener entre nuestras filas perfiles cualificados tanto con habilidades técnicas específicas como con habilidades más relacionadas con la personalidad o la comunicación, las denominadas ‘soft skills’. Y no nos podemos permitir contar únicamente con una parte de la población. De ahí la importancia de elevar la voz para que las chicas de hoy quieran formar parte de los líderes tecnológicos del mañana y poder contar con todo un abanico de profesionales con sus diferentes visiones.

La tecnología y el big data han abierto nuevas oportunidades a especialidades que antes ni imaginábamos y las mujeres no podemos dejar pasar la oportunidad de formar parte de esto por unos estereotipos del siglo pasado. Aquí hago un llamamiento a que las profesionales que nos apasionamos con nuestro trabajo alcemos la voz y ayudemos a las siguientes generaciones a que nos acompañen.

– ¿La brecha de género es mayor que en los países de nuestro entorno? En caso de ser así, ¿por qué?

Si bien es cierto que en países como Suecia, Dinamarca o Francia cuentan con unas políticas de igualdad de género reconocidas por todo el mundo, en España no nos encontramos tan lejos como podemos llegar a pensar. En cualquier caso, no creo que sea un problema local, sino global, por lo que tenemos un gran camino por delante que recorrer.

Pero más que lamentarnos por lo que queda por hacer, también es importante celebrar lo que sí se está haciendo. Es decir, ver que con cada iniciativa que nace también nos vamos acercando pasito a pasito al objetivo. Claramente, no es una situación que se pueda revertir de un día para otro, pero la buena noticia es que cada vez hay más países, más empresas y más profesionales que se suman al compromiso de hacer más estrecha esta brecha.

Gemma Muñoz, directora del Centre of Excellence (CoE) de Ibermática

– ¿Qué percepción tiene de este último año? ¿Se ha reducido esta brecha o la situación es similar?

Aunque parece que las consecuencias sanitarias y laborales derivadas de la pandemia han hecho que el resto de los temas hayan pasado a un segundo plano, en lo que respecta a la brecha de género en el entorno laboral, en sectores como el tecnológico he podido comprobar que algunas acciones han ayudado. Por ejemplo, la implantación del teletrabajo, que deriva hacia una posibilidad de conciliación familiar más real. Es decir, durante los dos últimos años hemos podido comprobar que la potenciación del teletrabajo y la posibilidad de realizar nuestra jornada laboral fuera de un horario laboral funcionan. Es más, muchas empresas cuentan con la tecnología y recursos para hacerlo y los beneficios que esto supone tanto para las empresas como para los trabajadores. Nosotros, por ejemplo, hemos implementado el trabajo 100% remoto para cualquier trabajador de la empresa, algo que parecía imposible hace pocos años.

Reconozco que las personas del sector tecnológicos somos unos privilegiados, ya que tenemos la gran suerte de poder realizar parte de nuestro trabajo de forma telemática.

– ¿Piensa que se están adoptando las políticas necesarias para reducir dicha brecha? ¿Qué cree que se debería hacer para lograrlo? ¿Y para quebrar el ‘techo de cristal’?

Esto es una carrera de larga distancia, donde cuenta cada obstáculo que pasamos. Pero con los datos sobre la mesa, la línea de meta sigue estando muy lejos. Aún así, seguramente necesitemos un empuje mayor en las políticas que se están llevando a cabo, pero para ello es importante seguir la ruta marcada. Es como cuando te enfrentas a un nuevo proyecto. Los primeros pasos son establecer unas bases y marcar una hoja de ruta guiada por una estrategia y una metodología. Pues en este caso es igual: tenemos que analizar lo que funciona y lo que no para saber escoger el camino correcto.

Creo que la visibilidad de la mujer en eventos tecnológicos, liderando proyectos rompedores y compartiendo experiencias propias, es vital para quebrar ese ‘techo de cristal’. Hace unos años, era la única mujer que hablaba sobre datos en un evento del sector. Ahora cada vez somos más y hacemos más ruido. No podemos poner todo el trabajo en manos de instituciones. Cada una de nosotras es parte importante en este cambio y estamos remando todas en la misma dirección para lograr este objetivo.

Apuesta por el talento femenino

– ¿Qué representación tiene la mujer en su organización? ¿Están tomando medidas para avanzar hacia la paridad? ¿En qué consisten?

Aunque hace pocos meses que formo parte de la familia de Ibermática, estoy muy orgullosa de pertenecer a una empresa que trabaja día a día para reducir esta brecha. Es más, gracias al impulso que desde la Comisión de Igualdad le dan al Plan de Igualdad de la compañía, existe una apuesta real por el talento femenino, lo cual es muy importante para un sector como el tecnológico, en el que la presencia de la mujer en España se sitúa en un 15%. Además, también trabajamos en iniciativas como el proceso de reorganización interna para impulsar el papel de la mujer en puestos directivos y con el que se han cuadruplicado la cifra de directivas este año.

Además de la apuesta por el talento femenino en puestos directivos e intermedios dentro de la compañía, también formamos parte de la ‘Alianza STEAM’ e ‘Inspira STEAM’ con las que impulsamos iniciativas, tanto en el ámbito educativo como en la formación, para hacer frente a los estereotipos de género asociados, por ejemplo, a las profesiones más tecnológicas.

– ¿Cuál ha sido su experiencia propia? ¿Alguna vez se ha sentido relegada frente a sus colegas por ser mujer?

Afortunadamente, no me he encontrado con ninguna barrera que me haya impedido seguir lo que me he propuesto, pero mentiría si no dijera que uno de los motivos que me impulsó a emprender y fundar El Arte de Medir (hoy by Ibermática), fue el poder conciliar mi familia con mi trabajo. Es por esto por lo que dentro del sector tecnológico debemos seguir apostando por iniciativas como el teletrabajo.

Otra de las situaciones con las que me encuentro a diario es la falta de mujeres en los eventos del sector y reuniones de empresarios. En este aspecto me gustaría añadir que existen infinidad voces femeninas que tienen mucho que aportar al sector tecnológico y que, afortunadamente, cada vez adquieren una mayor participación.