Si pensabas que Samsung ya lo había dicho todo en materia de wearables, estabas equivocado.
Se trata de Gear VR, unas gafas que básicamente se sirven de la pantalla Super AMOLED de 5,7 pulgadas y resolución Quad HD del flamante Galaxy Note 4, así como de la tecnología de Oculus, con quien se ha aliado Samsung, para entregar “una experiencia de realidad virtual móvil inmersiva”.
O, en palabras del propio JK Shin, “Gear VR va mucho más allá de las expectativas sobre cómo puede ser utilizada la tecnología móvil por los consumidores de contenido”.
Una de sus mayores ventajas es que funciona de manera inalámbrica, liberando al usuario de ataduras a la hora de sumergirse en mundos paralelos.
Sus lentes tienen un campo de visión de 96º, Gear VR incorpora sensores como acelerómetro, girómetro, magnético y de proximidad, cuenta con una microSD de 16 GB y trae preinstalado contenido tridimensional y vídeo de 360º.
Además, desde Samsung aseguran que tanto las personas miopes como las que sufran de hipermetropía podrán usarlas.
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