Gas Natural inicia la fusión con Unión Fenosa
A mediodía, las cotizaciones de Gas Natural y Unión Fenosa fueron suspendidas temporalmente por la Comisión Nacional del Mercado de Valores: se avecinaban cambios importantes. Media hora más tarde se confirmaba la previsión: la gasista iniciaba el proceso de fusión con la eléctrica, tras la OPA positiva lanzada contra las acciones de la compañía.
“El Consejo de Administración de Unión Fenosa y los administradores de Unión Fenosa Generación, suscribieron hoy el proyecto de fusión por absorción por parte de su principal accionista, Gas Natural”, anunciaba la firma barcelonesa en una nota de prensa. La eléctrica anunciaba también la modificación de su consejo, con la salida de Honorato López Isla como consejero delegado y la entrada de hombres de Gas Natural.
El movimiento no será sólo el movimiento por excelencia del mercado español y la fusión del año, sino que además puede arrastrar al mercado de las nuevas tecnologías en el torbellino de efectos que tendrá la fusión entre la gasista y la eléctrica.
Unión Fenosa es la responsable del 18% del capital de Indra, la principal compañía tecnológica de España. Indra es la única tech que cotiza en el Ibex 35, sólo acompañada, dentro del sector TIC, por Telefónica. La eléctrica deja paso a la gasista como dueña de ese paquete accionarial.
Salida o no
Gas Natural ha adelantado ya que no le interesan todas las inversiones de Unión Fenosa, ya que no todas entran dentro de las líneas de actuación de la firma. La tecnológica es uno de esos sectores poco interesantes para la gasista que aún así nunca ha dicho claramente que vaya a salir de Indra cuando fuese dueña y señora del paquete accionarial de la firma.
“Aunque no se ha adoptado decisión alguna en relación con su venta, tampoco puede descartarse”, fue la declaración más clara sobre el futuro de la empresa.
Desde Indra no entran a hacer valoraciones del tema, manteniéndose siempre en un discreto tercer o cuarto plano sin comentar qué esperan que les depare el futuro.
Sólo queda, por tanto, esperar: en algún momento, la gasista tendrá que tomar una decisión sobre la continuidad o no en una empresa que, por el momento, parece una excepción dentro de los malos tiempos que corren. Acorde o no, Indra ha mantenido tasas y previsiones de crecimiento en los últimos resultados presentados.