Franquicias TIC o cómo autoemplearse en tiempos de crisis
Durante los últimos años ha crecido el número de firmas vinculadas a la informática e Internet, caracterizadas por su resistencia a la crisis y la modesta inversión necesaria.
Exclusivas o ‘low cost’
Cuando alguien decide franquiciarse, lo que ha de tener en cuenta a la hora de elegir una franquicia u otra son las condiciones exigidas, es decir, “los cánones, los royalties, las zonas de exclusividad, la duración y la renovación del contrato, entre otros aspectos”, explica José Augusto Sánchez.
En este sentido, durante los últimos tiempos se ha notado una importante reducción de las exigencias económicas para franquiciarse, habiendo proliferado las denominadas firmas ‘low cost’. De hecho, el 42% de las enseñas requieren actualmente menos de 60.000 euros de inversión mínima e incluso un 14% se encuentra por debajo de los 30.000 euros
Como ejemplo, montar una franquicia de MSweb. es o PC Box requiere un canon de entrada de 30.000 euros en el primer caso y de 6.000 a 12.000 euros en el segundo, a lo que hay sumar, en el caso de PC Box, un royalty del 3% de las ventas y otro publicitario de 125 euros mensuales. Por su parte, Beep y PC Coste no exigen canon de entrada, pero sí unos royalties similares.
La opción más económica en el sector es APP Informática, que requiere un canon de entrada de 500 euros y una cuota anual de 200. “Nos hemos adaptado a la crisis”, explica Javier Ginesta, socio fundador de la firma, “razón por la que hemos suprimido las cuotas de publicidad”. En este sentido, añade, “en vez de cobrar un royalty mensual, pagamos entre un 1% y un 3% a nuestros franquiciados por las ventas conseguidas, además de apoyarles en todo lo que podemos: publicidad, Internet, etc.”.
El resultado salta a la vista: APP Informática, que nació en 1995 en Valencia como asesoría de programación e instalación de redes, es hoy una tienda de informática con 560 establecimientos y su objetivo es llegar al millar entre 2015 y 2017. Un objetivo ambicioso en un contexto como el actual, tal y como explica Ginesta: “Aunque la crisis está pegando, seguimos creciendo con fuerza”.
El perfil del franquiciado de la firma es similar al de muchas otras enseñas del ámbito tecnológico, señala Ginesta: “Antes eran empresarios, ahora se busca el autoempleo y muchos son jóvenes con conocimientos informáticos”. La razón de que este sector se haya consolidado a pesar de la crisis se encuentra, en su opinión, en que “la informática se ha convertido en una necesidad, por lo que sigue teniendo mucha demanda”.