Margaret Lewis, Directora de Soluciones Empresariales y Estrategia de Software de AMD, nos explica la crítica importancia de las reducciones en el consumo eléctrico de la empresa gracias a la Virtualización.
Introducción a AMD-V
Lamentablemente, las antiguas arquitecturas de procesador basadas en un bus frontal común no son adecuadas para las nuevas necesidades que impone la virtualización. Múltiples sistemas operativos ejecutándose en un mismo servidor compiten por los recursos físicos, lo que exacerba los inevitables cuellos de botella que reducen el rendimiento y ralentizan los tiempos de respuesta de las aplicaciones.
Es por eso que el AMD64 es una plataforma ideal para la virtualización. La Arquitectura de Conexión Directa de AMD es una alternativa al bus frontal único y sus cuellos de botella, lo que permite una partición eficiente y un mejor acceso a la memoria y desde los núcleos de procesador. La tecnología HyperTransport maximiza el ancho de banda y minimiza la latencia.
Yendo un paso más lejos, AMD ha desarrollado la tecnología AMD-Virtualization (AMD-V) que consiste en una serie de extensiones de hardware para la arquitectura x86, y está diseñada para mejorar la eficiencia y reducir la carga de trabajo de las soluciones de virtualización basadas en software. AMD-V simplifica las actuales soluciones de virtualización basadas exclusivamente en software al reducir –y en ocasiones eliminar- el coste de procesamiento que supone la interceptación y emulación de las instrucciones ejecutadas dentro del sistema operativo alojado. Además, la tecnología AMD-V aprovecha al máximo las posibilidades del procesador AMD Opteron con la Arquitectura de Conexión Directa para conseguir una gestión de la memoria más rápida y eficiente, un aspecto esencial para las aplicaciones que hacen un uso intensivo de la memoria, como son las de virtualización.
Finalmente, el Controlador Integrado de Memoria de AMD puede reducir la latencia y elevar el ancho de banda de acceso a la memoria, dos requisitos necesarios para responder a las tremendas necesidades de memoria que presentan los entornos de virtualización. La tecnología AMD-V con Rapid Virtualization Indexing mejora el rendimiento global de las aplicaciones virtualizadas y reduce la carga de trabajo del entorno de virtualización. Ningún otro fabricante de procesadores puede ofrecer capacidades como las que ofrece AMD para la virtualización sobre x86:
· Arquitectura de Conexión Directa – consigue aumentar el ancho de banda de acceso a memoria y la escalabilidad hasta niveles incomparables, permitiendo un mayor número de máquinas virtuales (VMs) por servidor y más usuarios y transacciones por máquina virtual.
· Gestión más eficiente del consumo energético – administra el consumo eléctrico de forma inteligente, para no desperdiciar energía durante los ciclos de baja utilización.
· RVI (Rapid Virtualization Indexing o Indexación de Virtualización Rápida) – acelera el rendimiento de muchas aplicaciones virtualizadas al gestionar la memoria de las VMs por hardware. El RVI (Rapid Virtualization Indexing) permite que las máquinas virtuales puedan gestionar la memoria directamente utilizando los recursos de hardware en vez de hacerlo a través de recursos de software. RVI consigue reducir los ciclos de Hypervisor y la penalización que esto implica sobre el rendimiento global, un efecto que aparece de forma habitual en los entornos virtualizados.
· TLB Etiquetado – son funciones de hardware que facilitan la alternancia entre VMs para mejorar la capacidad de respuesta de las aplicaciones
· Migración extendida de AMD-V – una función de hardware de apoyo a los entornos de virtualización por software para la migración directa de máquinas virtuales entre máquinas basadas en todas las generaciones disponibles de procesadores AMD Opteron™.