Con el fuerte desarrollo tecnológico y la dependencia cada vez mayor de los procesos de Negocio de las TI, los Procesos de Aseguramiento de la Calidad del software se han convertido en una necesidad. Juan Manuel Ferrar, director general y cofundador de Métodos y Tecnología nos habla de ello.
Y es que el TMMi no es sólo un modelo teórico, sino un conjunto bien definido de áreas de proceso y objetivos basados sobre casos prácticos. TMMi utiliza el concepto de niveles de madurez para la evaluación y mejora del proceso. Define cinco niveles de madurez con sus correspondientes áreas de proceso, así como los objetivos específicos y genéricos, y las prácticas específicas y genéricas. Los niveles son:
- Level 1 Initial: no existe un proceso definido de pruebas y a menudo se incluyen las pruebas dentro del debugging (depuración de código software). La organización a menudo no cuenta con un entorno estable para el soporte de los procesos.
- Level 2 Managed: las pruebas llegan a ser un proceso gestionado y claramente separado del debugging.
- Level 3 Defined: las pruebas no representan una fase aislada posterior a la codificación, se encuentran totalmente integradas en el ciclo de vida de desarrollo del software y los hitos asociados.
- Level 4 Management and Measurement: el proceso de pruebas es un proceso perfectamente definido y medible.
- Level 5 Optimization: la organización es capaz de llevar un control sistemático de costes y efectividad del proceso de pruebas, el cual se encuentra completamente definido.
Con el empleo de estándares como el TMMi y la consecuente mejora del proceso de pruebas, se generan importantes beneficios para la industria del software ya que se incrementa la satisfacción del cliente al utilizar un software con una cantidad de errores inferior, los procesos de desarrollo son más eficientes y además, se contribuye a que los trabajadores TIC estén más satisfechos al proporcionarles herramientas y recursos apropiados para una realización más eficiente de su trabajo.
