El crecimiento en la adopción del cloud y multicloud en España unido a los cambios de hábitos laborales que estamos viviendo, con mucha mayor movilidad por parte de los trabajadores, están multiplicando de forma exponencial las necesidades de accesibilidad, seguridad y conectividad de las empresas, en un entorno en el que es clave garantizar la calidad de la experiencia de usuario. Las redes de comunicaciones deben responder a grandes retos y la tecnología SD-WAN se posiciona como una de las mejores opciones para responder a todos ellos.
La necesidad de escala, flexibilidad y agilidad en las comunicaciones actuales no puede ser soportada por las redes tradicionales diseñadas para responder a una arquitectura robusta pero muy estática del tipo ‘hub and spoke’. Este sistema tradicional se ajusta muy bien a entornos TI en los que el centro de comunicaciones está alojado en un data center corporativo propio y las conexiones se realizan de forma estática, punto a punto, que además requiere de un despliegue manual cuando es necesario. Realizar cambios, añadir conexiones o mantenerlas, es un trabajo arduo y lento en este tipo de redes.
Esta arquitectura se muestra especialmente ineficiente en el contexto actual, y sobre todo teniendo en cuenta la expansión de la adopción de cloud y multicloud que estamos viviendo, ya que este tipo de redes estáticas no pueden adaptarse al ritmo que necesitan las empresas. Además, en el caso del multicloud, las redes de comunicaciones deben estar preparadas para soportar una combinación híbrida de aplicaciones y datos alojados en una o más nubes junto con los propios centros de datos de la empresa.
Por todo esto, estamos viendo un movimiento de adopción hacia redes SD-WAN, que aportan una arquitectura simplificada, que soporta tecnologías de automatización mejorando la gestión y mantenimiento de la propia red. Estas redes además garantizan calidad en la conexión, aprovechamiento del ancho de banda y seguridad de conexión. Por otra parte, otra de las grandes ventajas de las redes SD-WAN es su capacidad para priorizar las conexiones que se reconocen como críticas para una empresa.
En conjunto, las plataformas y servicios SD-WAN representan una respuesta a los retos de conectividad y red actuales, así como una altísima adaptabilidad para ajustarse a las necesidades de negocio, incluyendo aspectos como la contención de costes.
Sin embargo, a pesar de todas sus bonanzas, las redes SD-WAN están evolucionando para seguir siendo una pieza clave de las comunicaciones y la conectividad de la empresa del futuro. Esta evolución está alineada, de forma positiva, con la de las propias necesidades del mercado, demostrando su relevancia como solución tecnológica de futuro.
Sin duda veremos la consolidación y/o extensión del concepto de Software Defined (SD) de la WAN a la oficina o sede, con las redes SD-Branch. Éstas permiten una integración más avanzada de redes LAN y WAN, con una gestión de red y de costes mucho más eficiente y flexible, aportando amplias funcionalidades de valor a negocio y convirtiéndose en herramientas clave de los procesos de transformación e innovación digital.
Por otra parte, las ya conocidas ‘Redes como Servicio’, basadas completamente en la nube, empezarán a no ser una rara avis en las empresas. Primero porque existe un movimiento natural de la economía digital hacia los modelos ‘as a service’; y segundo porque este tipo de redes son más flexibles, escalables y ágiles lo que da mucho margen de maniobra a las empresas para adaptar sus redes a su realidad en cualquier momento.
La combinación del Edge y la tecnología IoT también propiciará una evolución de las redes, con un enfoque de ventas en la automatización de la empresa y la optimización de los procesos.
Junto a estas evoluciones que tiene el cloud como escenario e impulsor, la tecnología de Inteligencia Artificial y el aprendizaje automático también van a propiciar evoluciones en la infraestructura de red. La naturaleza dinámica de los patrones de tráfico de las redes SD-WAN permitirá que con la aplicación de estas tecnologías se puedan detectar amenazas de seguridad con antelación o se pueda optimizar el enrutamiento del tráfico.
Finalmente, no olvidemos la evolución de las redes SD-WAN dentro de su rol de elemento de comunicaciones asociado al concepto SASE (Secure Access Service Edge). La combinación de elementos de seguridad y comunicaciones con un enfoque unificado, consumidos como servicio y preferentemente desde la nube nos van a proporcionar plataformas y soluciones más potentes y con más funcionalidades.
No podemos saber hoy cuáles serán las comunicaciones del futuro. Lo que está claro es que la evolución de las comunicaciones y la conectividad de cualquier empresa tendrá como objetivo fundamental garantizar la seguridad y la mejor experiencia de usuario, tanto para empleados como para clientes.
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