Pedro Martínez Busto, Director de Desarrollo de Negocio para el Sur de Europa de Aruba, explica los modelos de consumo flexible y las nuevas tendencias en el ámbito NaaS.
Hace más de una década, la flexibilidad empresarial era considerada por las empresas como algo bueno con lo que contar, la misma era percibida más como una ventaja competitiva adicional que como un imperativo y, desde luego, no ocupaba los primeros puestos en la agenda de las organizaciones.
Avanzando hasta el año 2022, sin embargo, observamos cómo la flexibilidad se ha convertido en sinónimo de supervivencia. A medida que la fuerza de trabajo distribuida se consolidando como una tendencia para el largo plazo, el cambio es nuestra nueva realidad y la flexibilidad ya no es opcional. El hecho de que los empleados trabajen cada vez más en remoto o de manera híbrida genera nuevos retos para los equipos de TI, que ya están sometidos de por sí a una enorme presión para garantizar que las redes empresariales siguen siendo fiables, seguras, escalables y que cumplen con las normativas de conformidad.
De acuerdo con Deloitte, estas nuevas demandas en relación con la red son uno de los factores clave que impulsan la necesidad de unos modelos de consumo más flexibles por parte de los proveedores de servicios TI. Las conclusiones de la firma muestran que la pandemia ha acelerado la evolución hacia las ofertas as-a-service/ como servicio: tres cuartas partes de los responsables de la toma de decisiones de TI encuestados aseguraron que estaban ejecutando la mitad de sus TI empresariales bajo este modelo. Según dicho informe, “el XaaS parece haber conquistado los corazones, las mentes y las carteras de las organizaciones”.
Una investigación propia de Aruba, realizada recientemente, confirma esta misma evolución acentuada hacia nuevos modelos de servicio. Nuestro informe, que incluye las opiniones de 5.400 líderes de TI de toda EMEA, muestra cómo las organizaciones son muy conscientes de la creciente necesidad de flexibilidad y por qué el Network-as-a-Service (NaaS) podría convertirse fácilmente en el modelo de consumo preferido.
El paradigma NaaS
La transformación digital en la era postpandemia está llevando a los responsables de TI hacia modelos de red más ágiles y adaptables. Nuestro estudio revela que, cuando se trata de los objetivos de gestión de red, las empresas dan prioridad a la necesidad de poder escalar rápidamente, al igual que a su interés en alinear mejor la red con las demandas del negocio. Además, el 72% de los encuestados mencionó el acceso a nuevas tecnologías como uno de los cuatro principales factores que estaban impulsando la inversión en redes.
Sin embargo, este deseo de adoptar nuevas tecnologías y de flexibilizar y alinear mejor la red requerirá, tanto de profesionales de TI capacitados para liderar el cambio, como una red que lo permita. En cuanto al NaaS, nuestra investigación reveló que el 100% de los responsables de TI encuestados ya están familiarizados con este término y, lo que es aún más significativo, que el 86% de las organizaciones están contemplando este modelo de una u otra manera. Y no resulta difícil entender el por qué…
La flexibilidad
Mientras las organizaciones siguen gestionando las restricciones, causadas por las medidas sanitarias, uno de los principales factores que impulsa el aumento de las conversaciones en torno a NaaS es tener la flexibilidad de poder escalar la red en función de las demandas del negocio, ya que el 75% de las empresas declararon que esto había originado su interés por dicho modelo. El interés creciente por la adopción de
NaaS también está respaldado por la expectativa de que este modelo sea capaz de liberar recursos del equipo de TI, que de este modo podría dedicarle más tiempo a la innovación y a las iniciativas estratégicas, además de reducir los costes operativos.
Efectivamente, NaaS permite a las empresas utilizar una red y sus servicios asociados sin tener que invertir en infraestructura. Para las empresas que luchan por mantener a raya los costes asociados a unas tecnologías en constante evolución, NaaS es una solución viable y eficaz.
La posibilidad de que las organizaciones aborden la infraestructura como un gasto operativo en vez de como una inversión también supone un beneficio en términos de recursos financieros y de asignación de capital, permitiendo que los flujos de salida de caja sean más estables y predecibles. Con los presupuestos ya sujetos a bastantes tensiones tras dos años de turbulencias sin precedentes, la adquisición directa de tecnología de red podría no ser una opción viable para muchas organizaciones. NaaS se proporciona bajo un modelo de suscripción que ofrece capacidad de elección en relación con los servicios y SLAs ofrecidos. Cuando las organizaciones experimentan un incremento inesperado en su número de usuarios o nuevas necesidades de servicios, pueden ampliar fácilmente sus recursos de red para satisfacer estas demandas. En esencia, el paradigma NaaS responde a la necesidad de poder adaptarse rápidamente – un requisito cada vez más importante.
La seguridad
Nuestra investigación sugiere que la seguridad también ha impulsado el interés creciente hacia NaaS, ya que el 65% de los encuestados consideró que este modelo les ayudaría a mejorar sus capacidades en este ámbito. De hecho, NaaS es una forma óptima de garantizar que la arquitectura de red se diseña con la seguridad como elemento fundamental. La componente de servicio gestionado del modelo NaaS permite a las empresas apoyarse en un equipo de profesionales expertos para asegurar un mejor cumplimiento de los requerimientos en relación con la seguridad y la protección de la red. Esto es especial relevante en el contexto actual, donde puede ser muy difícil y costoso para una organización contar con un equipo cualificado en plantilla que sea capaz de hacer frente al escenario creciente de ciberamenazas en continua evolución.
A modo de conclusión
A pesar de los claros beneficios del modelo NaaS, nuestra investigación también puso en evidencia que aún existen barreras para su implementación. Aunque observamos un conocimiento generalizado del NaaS como concepto, sólo 2 de cada 5 responsables de la toma de decisiones TI aseguraron que lo entendían realmente. No es de extrañar, por tanto, que sólo el 11% de estos líderes vean este modelo como una opción sólida y viable para las empresas hoy en día.
Sin lugar a duda, NaaS es capaz de reducir los costes de acceso a nuevas tecnologías y servicios de red, proporcionando una mayor flexibilidad, y ofreciendo un grado de personalización mayor para adaptarse a las necesidades específicas de cada organización. Para que esto se convierta en realidad, sin embargo, debemos cerrar la brecha existente entre el conocimiento “conceptual” y el entendimiento detallado de todas las ventajas que proporciona el modelo NaaS, para desbloquear todo su verdadero potencial.