Mark Barrenechea, presidente y CEO de OpenText Corporation, explica a los lectores de Silicon Week las claves que producirán una nueva revolución digital en la próxima década.
El ritmo de los negocios se ha acelerado y en los últimos veinte años hemos sido testigos de muchos más cambios que los ocurridos en los cien anteriores. En un mundo donde la tecnología afecta a todo, las empresas nunca han tenido una oportunidad tan increíble para re-inventarse – para alinear más estrechamente el negocio con la tecnología, ofrecer un valor significativo al cliente y lograr un impacto transformador del negocio.
Los cambios que se están produciendo hoy en día en el mundo empresarial son una reminiscencia de los setenta, cuando la tecnología prometía aportar ventajas competitivas y mayores eficiencias a través de la automatización. Los modelos de negocio se transformaron de nuevo radicalmente en los noventa, momento en el que la tecnología y el comercio se cruzaron con Internet. Las tecnologías de hoy en día – los medios sociales, la movilidad y la nube – están causando cambios radicales en muchas industrias, desde la editorial, hasta la del ocio y entretenimiento e incluso en los gobiernos de todo el mundo. Sectores enteros y anticuados modelos de negocio están siendo barridos a medida que la gente encuentra nuevas formas de acceder a la información, las noticias, el ocio, los productos y servicios para satisfacer sus necesidades diarias.
En este escenario nos preguntamos cómo la tecnología digital transformará los modelos de negocio para satisfacer las necesidades de la fuerza laboral, la cadena de suministro y los canales de marketing del futuro. En definitiva, ¿cómo será la empresa en el año 2020?
2020: Disrupción Digital
En 2020 todas las principales funciones operativas de la empresa serán digitales. La empresa digital implica una profunda transformación. Las organizaciones necesitarán digitalizar cada proceso y reconfigurar sus negocios para asegurar la competitividad y la eficiencia. Para mantenerse al ritmo de la evolución de las cambiantes demandas de los clientes y los negocios, la empresa actual deberá transformarse en la empresa digital del mañana.
La capacidad de la tecnología digital para acelerar las comunicaciones ha influido en la forma en que la gente interactúa con otros, con la información y con las empresas. La capacidad para gestionar de forma segura el intercambio de información – en multitud de formatos, muchos de los cuales ni siquiera se han concebido todavía- será crucial en la empresa del 2020.
La información forma parte fundamental de esta revolución digital. Será la nueva moneda de cambio y su papel será crucial en la innovación, el crecimiento y la oportunidad. La información lleva a un mayor conocimiento, mejores decisiones de negocio, una mayor satisfacción del cliente, agilidad, así como a la optimización del negocio. Pero para aprovechar todo el potencial de la información sin comprometer la productividad y la seguridad, las empresas necesitan una tecnología de Gestión de la Información Empresarial.
En el año 2020 veremos una convergencia de fuerzas hacia un nexo que la empresa puede capitalizar para crear oportunidades de crecimiento e innovación. Estas tres fuerzas principales serán: las tecnologías disruptivas, la fuerza laboral de la Generación Z y la digitalización a escala masiva. Una vez combinados, estos tres factores crean una potente plataforma para el cambio.
Las Tecnologías Disruptivas
Las redes móviles 5G, las televisiones holográficas, nanobots, las tecnologías wearable como las Google Glasses, la impresión en 3D, y el Internet de las Cosas (IoT), son tecnologías cuyo desarrollo sucede a la velocidad de la luz. Su impacto será indudable en el mundo empresarial y su uso será ya habitual en el año 2020.
En 2020, las redes inalámbricas 5G tendrán 1.000 veces más capacidad, podrán realizar conexiones para al menos cien mil dispositivos y la experiencia de usuario será de 10 gigas lo que garantizará una latencia y tiempos de respuesta muy bajos. El despliegue de estas redes se producirá entre 2020 y 2030. El acceso a la radio 5G se construirá sobre nuevas tecnologías de acceso a radio (RAT) y que evolucionarán en base a la tecnología inalámbrica existente. Los avances en redes inalámbricas impulsarán también el crecimiento económico y social en formas totalmente nuevas. Con la tecnología 5G las redes serán capaces de proporcionar conectividad “de distancia cero” entre la gente y las máquinas conectadas.
En 2020 los límites entre tecnología y las personas se difuminarán, debido a la aparición de televisiones holográficas, la impresión en 3D y las tecnologías wearable. Escribir mensajes mediante el pensamiento reemplazará a la escritura a través del smartphone. La capacidad para escanear un objeto en 3D, enviar el archivo digital e imprimir una réplica en 3D será algo normal. Aunque aún se considerarán un objeto de lujo, las imágenes holográficas serán utilizadas para decorar habitaciones. Los nanobots serán capaces de sentir estímulos, llevar a cabo cálculos y computaciones complejas, comunicarse y colaborar. Sectores enteros se verán afectados por la consolidación de la información de diversos sistemas, incluyendo los dispositivos móviles, GPS y video-vigilancia.
Todas estas aportaciones estarán conectadas y disponibles en las redes para contribuir al Internet de las Cosas, también llamado el nuevo sistema nervioso digital del mundo. El IoT reúne todas las tecnologías inalámbricas, sistemas micro electromecánicos e Internet para conectar múltiples máquinas dispares e intercambiar información. Según Gartner, en 2020 existirán 26.000 millones de dispositivos en el Internet de las Cosas.
El IoT integrará de forma automática datos, personas y procesos en nuevas y diversas formas. En el año 2020 habrá 5.000 millones de usuarios de Internet. La conectividad hiper-móvil ya está comenzando a ser rentable y se está extendiendo. Con la mejora de las comunicaciones y las innovaciones como el IoT el mundo se está haciendo más pequeño. Todo ello dará lugar a la creación de nuevos productos y servicios. La capacidad para explotar el Internet de las Cosas será crítica para la empresa digital del 2020.
La fuerza laboral de la Generación Z
En 2020 más del 50 por ciento de la fuerza laboral la constituirán nativos digitales y se espera que estén conectados al trabajo 24×7 de la forma que sea. La generación Z ha crecido con un acceso sencillo a la red y un total conocimiento sobre Internet y sus aplicaciones. Esta generación tecnológicamente experta espera tener acceso ilimitado a la información en tiempo real y de forma inmediata. La Generación Z presenta el mayor cambio generacional nunca antes visto en una fuerza laboral, y supone un reto para los líderes, directivos, departamentos de Recursos Humanos de empresas de todos los sectores, que tendrán que cambiar radicalmente la forma de atraer y retener el talento.
La Digitalización masiva
El crecimiento de los usuarios de Internet resultará en una mayor cantidad de gente, reuniéndose, transmitiendo e intercambiando información online. Internet continuará creciendo como canal para la distribución, modernizando las cadenas de suministro en muchas industrias. En el año 2020 el suministro de software, vídeo, audio, juegos y otros contenidos multimedia será casi enteramente digital, sin requerir medios físicos. La transformación de lo análogo a lo digital ya está en marcha. Esto es una evidencia hoy en día, a medida que el correo electrónico y los mensajes de móviles han dejado al servicio postal como algo obsoleto; los periódicos están siendo reemplazados por sitios online donde son los propios usuarios los que general el contenido; y los sellos discográficos están siendo sustituidos por los propios artistas que comercializan su música a través de tiendas online como iTunes.
La información, nueva moneda de cambio
Todas estas innovaciones tecnológicas mencionadas anteriormente suponen un reto sin igual a las reglas establecidas en los negocios. Lo que tienen en común todas ellas es que dan paso a una nueva forma de usar la información. La información ya no es solo un factor de coste sino la base para la innovación, el crecimiento y la competitividad. Es el componente fundamental de la estrategia corporativa.
La información es la nueva moneda de cambio en la economía digital. En 2020, ésta será el factor de impulso para la competitividad en la empresa. Uno de los mayores retos relacionados con la transformación digital será cómo gestionar de forma eficiente los crecientes volúmenes de información para optimizar su valor y reducir los riesgos asociados a ella. La consultora IDC predice que en el año 2020 el mundo generará 50 veces más cantidad de información que en la actualidad. En este contexto se necesitarán nuevas tecnologías, capacidades y análisis para mitigar el coste de la creación, captura, gestión y almacenamiento de la información.
A medida que las organizaciones recolectan volúmenes de información cada vez mayores, el valor de la gestión de la información empresarial cobra mayor importancia. Según un estudio de Forbes, el 95 por ciento de las organizaciones correlacionan la gestión de la información con el éxito en el negocio. Por todo ello, la gestión y el aprovechamiento de la información corporativa será, sin duda, uno de los factores clave para el CIO del 2020 en cuanto a innovación y crecimiento.