
En esta tribuna, Rick Vanover, vicepresidente de estrategia de producto de Veeam, analiza la importancia de la integridad de los datos en las migraciones y cómo las empresas pueden garantizar la precisión, seguridad y fiabilidad de su información para evitar pérdidas y minimizar riesgos.
Las empresas gestionan ecosistemas de datos cada vez más complejos, por lo que nunca ha sido tan importante mantener la integridad de los datos cuando se trasladan. Sin embargo, garantizar su integridad es cada vez más difícil, lo que expone a las organizaciones al riesgo de pérdidas. Para que las empresas dispongan realmente de la libertad de datos, no solo deben ser capaces de trasladarlos, sino también de garantizar que sigan siendo precisos, completos y fiables en cada migración.
El impacto de la migración de datos en su integridad
El movimiento de datos plantea uno de los riesgos más importantes para su integridad, siendo la falta de pruebas previas a la migración, la principal causa de problemas como la pérdida de datos. Esto puede provocar tiempos de inactividad inesperados, daños en la reputación y pérdida de información importante. El reciente incidente mundial de Crowdstrike es un ejemplo de cómo un fallo puede tener un impacto significativo en toda la empresa y sus partes interesadas. Envía un mensaje claro: las pruebas antes de la implantación son esenciales. Permiten a las organizaciones identificar posibles problemas y aplicar medidas correctoras.
El papel de la concienciación y la preparación en la integridad de los datos
La integridad de los datos empieza por la concienciación. Muchas organizaciones no son plenamente conscientes de qué datos poseen, cuándo se han añadido o qué se ha actualizado exactamente a lo largo del tiempo, lo que dificulta la realización de auditorías de datos o comprobaciones de integridad. Crear conciencia de los activos de datos es el primer paso para validarlos y detectar anomalías basadas en análisis anteriores.
A su vez, es fundamental realizar pruebas rigurosas y continuas para la migración. Esto incluye pruebas tanto funcionales como económicas. La funcionalidad se refiere a lo bien que opera el sistema después de la migración, garantizando que sigue cumpliendo las expectativas; mientras que la economía hace referencia a la rentabilidad del sistema o la aplicación, que es especialmente importante con las migraciones basadas en la nube.
Las pruebas económicas consisten en examinar el consumo de recursos, los costes del servicio y la escalabilidad general para determinar si la solución es económicamente sostenible para la empresa. También se pueden aprovechar herramientas como Health Check de Veeam para realizar auditorías periódicas y automatizadas sobre la integridad de los datos. Estas comprobaciones ayudan a detectar cualquier incoherencia en los archivos de las copias de seguridad, lo que permite a las empresas rectificar y garantizar la recuperabilidad de los datos.
Las organizaciones deben comparar la preparación para la migración con el entrenamiento de los pilotos para resolver imprevistos. Si se planifican los posibles problemas que pueden encontrar las empresas durante la transferencia de datos entre sistemas y plataformas, se puede minimizar el riesgo y el impacto de los datos comprometidos.
Y lo que es más importante, las empresas deben prepararse para las migraciones aunque no prevean cambios inmediatos. Al igual que los pilotos no esperan a que las condiciones de vuelo sean malas para poder entrenarse ante un aterrizaje o una respuesta de emergencia, las empresas tampoco deben esperar a que se les notifique un cambio inminente para iniciar las comprobaciones y pruebas de datos. El volátil y vertiginoso entorno tecnológico nos obliga a estar siempre preparados para evitar que nos pillen desprevenidos.
Integridad de los datos y copias de seguridad seguras
Por último, un sólido plan de copia de seguridad y recuperación de datos constituye la última línea de defensa. El Informe de Tendencias de Ransomware 2024 de Veeam encontró que el 65% de las organizaciones no tenían un plan de recuperación para una crisis a nivel de infraestructura, y sólo el 50% tenía copias de seguridad inmutables. Esto perjudica significativamente la capacidad de una empresa para restaurar eficazmente los datos dañados o perdidos. Afortunadamente, existen medidas sencillas que las empresas pueden adoptar para salvaguardar sus datos y mejorar su resiliencia. Siguiendo la regla 3-2-1-1-0, que recomienda almacenar tres copias de los datos en al menos dos tipos de soportes diferentes, con una copia fuera de las instalaciones, una copia aislada (air-gapped) y sin errores, las empresas pueden aumentar significativamente la resiliencia de sus datos.
La libertad de los datos no sólo consiste en tener la capacidad de moverlos, sino también en garantizar que sigan siendo precisos, seguros y utilizables durante las migraciones o los cambios de plataforma. Las pruebas y evaluaciones periódicas de los datos ayudan a mantener tanto la integridad como la libertad, garantizando que las empresas puedan confiar en sus datos cuando más lo necesitan.
Por último, disponer de un sólido plan de copia de seguridad y recuperación proporciona a las empresas tranquilidad y una red de seguridad, garantizando que puedan recuperarse y avanzar con eficacia si algo sale mal. Por ejemplo, Anheuser-Busch Employees’ Credit Union pudo migrar sus 130 máquinas virtuales a un nuevo edificio con total tranquilidad gracias a las rigurosas pruebas previas a la migración y de recuperación ante desastres. En el improbable caso de que algo fallara durante la migración, sabían que se podría restaurar completa y eficientemente, minimizando cualquier tiempo de inactividad e interrupción de sus operaciones.