Oriol Farré, Director de Preventa de Soluciones Financieras de Oracle Ibérica, habla de analítica aplicada a los departamentos financieros.
Nos encontramos en uno de los periodos económicos más volátiles e inciertos de las últimas décadas. El Brexit ha desestabilizado los mercados financieros y los tipos de cambio, por lo que muchas empresas se han visto obligadas a modificar sus estrategias a nivel nacional e internacional. Además, la creciente sensación de malestar social e inestabilidad política a escala mundial ha provocado una pérdida de confianza del mercado.
Para afrontar la incertidumbre, los conocimientos específicos y la visión estratégica del departamento de finanzas se convierten en el centro neurálgico de la empresa, siendo el director financiero el que marca las pautas a seguir para garantizar que la empresa pueda llevar a cabo sus planes de futuro.
Prepararse para la incertidumbre exige una previsión y una planificación más minuciosas. Los directores financieros y sus equipos deben analizar los datos internos de la empresa, los históricos del mercado, los de proveedores y clientes, así como las fuentes no estructuradas (histórico de noticias e información demográfica). Sin embargo, ahora también es de gran importancia tener en cuenta los indicadores futuros que ayuden a predecir los desafíos y las oportunidades que están por venir.
Las finanzas: el nuevo abanderado de la analítica aplicada
Es igualmente importante que los equipos financieros sean capaces de modelar la estrategia de la empresa en función de las diversas contingencias posibles y llevar a cabo los ajustes necesarios utilizando los mejores datos disponibles. Esto no despeja las incógnitas del futuro pero reduce la amenaza de la incertidumbre.
Así pues, los procesos de previsión y planificación deben adaptarse a la velocidad a la que cambian los mercados. Los procesos manuales tradicionales y los análisis con hojas de cálculo no son la solución más adecuada, por lo que los equipos de finanzas están automatizando sus estrategias de planificación y previsión. Esto permite consolidar con rapidez las fuentes de datos y los modelos predictivos y reduce el riesgo de error humano.
Para que una empresa pueda superar la incertidumbre con éxito, toda la organización debe funcionar al unísono. La falta de comunicación entre las líneas de negocio es una barrera importante y el departamento de finanzas debe ser el eje alrededor del cual giran todos los demás departamentos. Su situación es idónea para comunicar la visión de la dirección a las diferentes líneas de negocio y trabajar con sus líderes para llevar a cabo esta visión.
Estudios de Oracle han puesto de manifiesto que casi un tercio de los líderes financieros admite que existe una falta de coordinación entre su departamento y la empresa en general y que ello obstaculiza el proceso de cambio. Por tanto, es esencial reforzar la colaboración con el departamento de TI: el 73 % de los líderes financieros aseguran que es necesario mejorar la coordinación entre la dirección informática y la financiera para impulsar la transformación de la empresa.
En este contexto, los equipos financieros amplían sus habilidades tradicionales y, además de los expertos en procesamiento de datos y presentación de informes, también necesitarán rodearse de pensadores estratégicos, científicos de datos y gestores de recursos humanos que desempeñen un papel más activo en cada rama de la empresa.
Cuando la empresa moderna se somete a una transformación digital, es de suma importancia comprender de forma exhaustiva las analíticas de datos y el modo en que las tecnologías emergentes afectarán a la organización. Esta es otra razón por la que los directores financieros y sus equipos tendrán que colaborar estrechamente con los expertos en datos y en TI externos al departamento financiero.
Los líderes financieros tienen la misión de aportar claridad y coherencia a la empresa en una época de cambios constantes. El departamento financiero deberá prepararse para actuar en los momentos de cambio, unificar las líneas de negocio y acelerar los procesos internos para trazar el mejor itinerario posible y prepararse para cualquier sorpresa que el futuro depare.6