Javier Montemayor, director de Operaciones de Interxion España explica cómo los sistemas de cerramiento de pasillo frío reducen el consumo eléctrico y proporcionan una refrigeración eficiente a los equipos IT.
El aprovechamiento energético es hoy en día uno de los focos de interés de buena parte de las empresas que gestionan centros de datos profesionales. El alto coste de la energía y los elevados índices de consumo energético han provocado que este sector haya tenido que buscar soluciones para mejorar las condiciones de refrigeración del centro de datos y una mayor eficiencia energética. La incorporación de mejoras como el cerramiento de pasillo frío está ayudando a las compañías a racionalizar el uso de los recursos y ofrecer a sus clientes un mejor rendimiento en el alojamiento de sus servidores.
Sin duda, en los últimos años se ha avanzado mucho en todo lo relativo al consumo y aprovechamiento energético. Si comparamos uno de los equipos de refrigeración del año 2002 con la tecnología existente en la actualidad, no debería sorprender que la capacidad de estas nuevas tecnologías sea cuatro veces superior. Pero no solo la capacidad es superior, sino también el rendimiento de estos equipos de refrigeración, a los que cada día se les pide que sean más eficientes energéticamente.
A pesar de que los sistemas de refrigeración son más eficientes, también han de refrigerar mayores densidades producidas por los nuevos servidores que tienen mayor capacidad de proceso y mayor disipación de calor.
La apuesta por estrategias de climatización como el cerramiento del pasillo frío se está convirtiendo en un estándar dentro de las compañías del sector, al repercutir en los beneficios que obtienen los clientes y, por ende, sobre la política de responsabilidad social corporativa de la propia compañía.
El cerramiento del pasillo frío, sostenibilidad para el CPD
La virtualización ha derivado en la concentración de servidores más potentes en un menor espacio. Esta concentración de servidores en un menor número de bastidores provoca que en pocos minutos una sala técnica alcance altas temperaturas, pues la generación de calor también es mayor. La climatización se convierte en un valor clave para que el CPD funcione de manera eficiente.
Por ello, la refrigeración de los servidores dentro del cerramiento de pasillo frío implica una mejora de la eficiencia y capacidad de los sistemas de aire instalados en el CPD, pues se utilizan todos los recursos frigoríficos en refrigerar el pasillo frío sin importar la temperatura del pasillo caliente. En las configuraciones antiguas, la refrigeración se disipaba por toda la sala sin atacar los focos de calor.
Para la instalación de un cerramiento de pasillo frío, hay que prestar atención al detalle constructivo para no tener pérdidas de aire, procurando ser lo más estanco posible. Este objetivo se logra a pesar de las necesidades especiales que presentan los cubos, como puedan ser entradas de cableado, sistema de extinción de incendios o iluminación, por mencionar algunas de ellas.
La saturación y sobrepresión de aire frío en los frontales de los bastidores o racks garantiza la refrigeración uniforme de los servidores alojados en contraposición a las soluciones convencionales donde se pueden producir bucles o bolsas de aire caliente. Asimismo, el aire caliente expulsado por los servidores, no se mezcla con el aire frío de la sala obteniendo un mayor rendimiento de los equipos de refrigeración de la sala técnica.
Esta filosofía implica que con el mismo frío utilizado en una solución convencional, se obtiene una mayor capacidad de refrigeración de los servidores y una mayor eficiencia energética, llegando al 30% de mejora.
En conclusión, podemos decir que la apuesta por ahorros de energía en los CPD y la búsqueda de la eficiencia mediante cerramientos de pasillo frío no deben ser un caso aislado, sino un punto más a tener en cuenta para mejorar la productividad, competitividad y contribuir a la sostenibilidad del data center.
