Europa se prepara para dar el gran salto a la nube

Las empresas europeas y los propios organismos de la Unión Europea han tardado en dejarse convencer por las ventajas de la computación en la nube, pero según los analistas ha llegado el momento de sumarse a esta tendencia que ya ha sido adoptada en mayor medida por las autoridades de Estados Unidos.

La tecnología cloud es considerada una de las claves para que las organizaciones puedan simplificar su funcionamiento y ahorrar tiempo y dinero. Además, según los últimos cálculos, la adopción de estas herramientas supondrá 2,4 millones de nuevos empleos en las principales economías europeas.

Pero no todo son ventajas al hablar de la nube, ya que también provoca recelos en torno a la seguridad y el respeto por la privacidad de los datos.

“Normalmente prefiero conceptos claramente definidos”, explica Neelie Kroes, vicepresidenta de la CE, “pero cuando se trata de computación en la nube entiendo que no podemos esperar a una definición universalmente aceptada, tenemos que actuar”.

La condición necesaria para que Europa se suba a la nube es que los estados miembros pongan en común sus reglas sobre privacidad y determinen cuáles son sus límites y las leyes que se aplican en cada caso, según informa Reuters.

“Los principales obstáculos son las barreras legales, los enormes niveles de burocracia y las dificultades de ser compatible con 27 conjuntos diferentes de reglas”, según apunta Daniele Catteddu, experto en seguridad que trabaja en la estrategia de la UE para la adopción de la computación en nube