¿Por qué Europa no tiene un Silicon Valley?
En Estados Unidos, el sol dora Silicon Valley y las innovaciones TI florecen como en Europa sólo hacen las flores en primavera. El Viejo Continente se ha quedado ligeramente analógico y no ha conseguido crear su propio valle del silicio.
Mientras India pisa fuerte con Bangalore, la nueva Meca de las nuevas tecnologías, Europa permanece durmiente y ajena al impulso del mundo tecnológico. ¿Cuáles son las causas que impiden que el Viejo Continente se convierta en la nueva tierra prometida de las TI?
Las claves de este fracaso son la falta de reconocimiento internacional de los clusters europeos de nuevas tecnologías, los problemas de acceso en Europa al capital riesgo y el poco apoyo político, como concluye un estudio de la Universidad de Darmstadt publicado por Software AG. A estos problemas se suma la consecuencia directa de uno de ellos: el sistema de patentes software de Europa está subdesarrollado.
La universidad alemana ha comparado el pasado y presente de varias áreas tecnológicas del mundo, entre las que se encuentra Silicon Valley y las europeas de Rhein-Main-Neckar y Dresde, en Alemania, y la finlenadesa de Oulu.
El 20% de Silicon Valley
Las conclusiones son bastantes deprimentes, al menos para el tejido económico empresarial europeo. En Rhein-Main-Neckar se han asentado 8.000 empresas en un área de 5.000 kilómetros cuadrados, frente a los 4.000 de Silicon Valley y sus 7.000 compañías.
Aún así, los ingresos de la estadounidense son de 180.000 millones de euros, frente a unos más modestos 42.000 de la europea. En creación de empleo también están a años luz: 500.000 trabajadores en la más exitosa y 80.000 en la menos. Las diferencias son abrumadoras. Rhein-Main-Neckar sólo es el 20% de las cifras de Silicon Valley.
Más cifras: a los clusters europeos les falla el atraer mano de obra extranjera. No saben captar talento, como si hacen es Estados Unidos. Según las cifras de este informe, el 50% de las empresas del valle del silicio han sido creadas por inmigrantes.
“Tenemos la masa crítica en términos de empresas establecidas de TI, la voluntad política y un diferenciador importante en comparación con otros clusters: la proximidad a las industrias usuarias de esas TI”, explica el CEO de Software AG, Karl-Heinz Streibich.”Los clusters y las alianzas ofrecen un camino a seguir por la industria del software europeo, en tanto que impulsan el crecimiento y se mantienen independientes respecto a la consolidación actual de la industria”, continúa, recordando “son indispensables dentro de una política económica exitosa, en Alemania y en toda la Unión Europea”
La necesidad de un marco regulatorio más fuerte es compartida por el vicepresidente de Gartner, Massimo Pezzini, quien reconoce que aunque Europa ha producido muy buenos productos en software, rara vez se han convertido en líderes de mercado. “Para aprovechar la excelencia tecnológica europea en términos de oportunidades de negocio y creación de puestos de trabajo cualificados, debe desarrollarse un entorno financiero y regulatorio más favorable“, alerta.
Por ahora, la Europa de las TI parece seguir durmiendo