El 60% de las empresas europeas no encriptan sus e-mails
Más de la mitad de las empresas europeas no encriptan sus correos
electrónicos antes de enviarlos, según revela el último estudio hecho público
por la compañía Tumbleweed.
De hecho, más de un empresa europea de cada diez, es decir, un 13% reconoce
haber sido víctima de violación de datos confidenciales salientes en el
transcurso del año pasado.
El informe, que Tumbleweed encargó al instituto de sondeo
Vanson Bourne, subraya “la
inquietante indiferencia” de las empresas frente a un problema siempre presente,
en lugar de una sensibilización creciente frente a esta cuestión.
Por otro lado, los datos ponen de manifiesto sin embargo que para el 39% de
los consultados, la principal preocupación de sus sistemas de mensajería online
es la transmisión de datos confidenciales. Paralelamente, el segundo problema
considerado como más preocupante -para un 32%- es la utilización de la
mensajería en Internet con finalidades personales.
Asimismo, más de un tercio de las empresas sondeadas (un 36%), considera el
impacto en términos de imagen como la consecuencia más negativa de estos
problemas de seguridad, mientras que un 26% añaden las multas y los temas
judiciales a su lista de preocupaciones.
La amenaza interna es un problema serio
No obstante, más de la mitad de las empresas -un 59%- asegura que no
disponen de recursos para la encriptación porque no sienten esa necesidad
comercial. Esto demuestra que aún hace falta una importante labor de
sensibilización acerca de los peligros de la violación de datos y las distintas
soluciones disponibles en el mercado para el futuro.
De hecho, sólo las empresas de servicios financieros utilizan
sistemáticamente procedimientos de encriptación para sus emails salientes.
“El encriptado es esencial para toda comunicación vía Internet, en
particular para los flujos de salida por los cuales los trabajadores envían,
deliberada o involuntariamente, informaciones sensibles sobre redes que son
accesibles a todos o son vulnerables”, explica Soeren Bech, directora comercial
EMEA de Tumbleweed.
Además, Bech califica de “alarmante” el hecho de que después de los numerosos
incidentes que se han producido recientemente en Europa y el impacto negativo
que éstos han tenido en la reputación de las empresas, las distintas entidades
no se tomen en serio esta “amenaza interior”.
Otra tendencia que se desprende del informe es que el spam se mantiene como
una de las principales inquietudes de las empresas europeas, ya que hace más
pesados los procesos de gestión de los e-mails, por lo que se sitúa por
unanimidad entre las tres primeras preocupaciones.
Por otra parte, otra de las alarmas provocadas por el spam es su transmisión
a los consumidores finales, lo que da lugar a la proliferación de denuncias en
las oficinas de los administradores informáticos.
En este sentido, el spam es especialmente preocupante en España, donde el 45%
de las personas interrogadas califican el tiempo dedicado a la resolución de
este tipo de problemas como ?perjudicial? o ?muy perjudicial? para la empresa.
Finalmente, el estudio muestra que los virus también monopolizan las fuentes
informáticas de las empresas, ya que un 30% de las entidades europeas han sido
infectadas por un virus en el transcurso de los últimos doce meses, y este
porcentaje alcanza el 36% de las grandes empresas.