Treinta y ocho estados de los Estados Unidos están investigando la recolección de datos WiFi que Google realizó con sus coches Street View durante los últimos tres años.
El fiscal general del estado de Connecticut, Richard Blumenthal, será el encargado de dirigir las investigaciones que tratarán de dilucidar si el software Street View tenía como objetivo recolectar esos datos.
Blumenthal ya ha defendido a los usuarios con agresividad en otros juicios que estaban relacionados con los derechos y la privacidad de los usuarios en redes como Facebook o MySpace.
Google ya admitió hace unas semanas que sus coches habían recolectado 600 Gbytes de datos de redes WiFi durante los pasados tres años, aunque dio una excusa ambigua para explicarlo y trató de indicar que el software tenía un problema que ya está corregido.
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