España es digital (en el pago): el 92 % de los españoles no lleva dinero en efectivo

Cada vez más consumidores valoran la posibilidad de disponer de distintas alternativas de pago más allá de la tarjeta, como por ejemplo la plataforma Bizum.

La implantación gradual del pago electrónico ha experimentado un espectacular crecimiento en los últimos tiempos, especialmente desde el inicio de la pandemia, hasta el punto de que en la actualidad el 92 % de los españoles no lleva dinero en efectivo y un 95 % prefiere pagar con tarjeta.

Y lo refleja el reciente estudio “Nuevos hábitos en métodos de pago en España” de la empresa tecnológica española especializada en desarrollo de herramientas de pagos online PaynoPain, también refleja que el dispositivo preferido para efectuar compras online es el smartphone.

En cuanto a los usos más habituales que se hace de los pagos electrónicos son los siguientes:

  • Pagar a diario: 95 %
  • Gestión a suscripciones: 17 %
  • Administrar gastos: 5 %
  • Gestionar ahorros e inversiones: 2 %

Las razones esgrimidas para preferir el pago electrónico de manera tan aplastante frente al pago en efectivo son estas:

  • Comodidad: El 92 % de los encuestados prefieres no llevar efectivo por resultar más cómodo el pago con tarjeta, con el factor añadido de que las aplicaciones móviles de la mayoría de los bancos disponen de herramientas que permiten llevar las cuentas de dichos pagos.
  • Seguridad: Casi el 33 % de los encuestados coinciden en que la tarjeta bancaria es el método de pago que resulta más fiable siendo los sistemas de doble autentificación los favoritos de los usuarios.
  • Omnicanalidad: viste una concienciación cada vez mayor (77 %) de usuarios que buscan disponer de diferentes opciones de pago, como por ejemplo la plataforma Bizum.

Más allá de aplicar el pago electrónico a las tiendas online, donde resulta más sencillo hacer lo que en las tiendas físicas, en estas una amplia mayoría (90 %) opta por la compra presencial para poder ver el producto físicamente, lo que aporta una experiencia adicional de la que carecen las tiendas online.