eSIM, la evolución de la tarjeta SIM
El primer dispositivo que incorpora este chip que se inserta directamente en el terminal, el smartwatch Samsung Gear S2 Classic 3G, empezará a venderse en unos meses.
La tarjeta SIM, esa pequeña pieza metalizada que ha sido el elemento central de nuestros móviles desde los 90, parece abocada a su fin. Puede pasar tiempo hasta que sea definitivamente cosa del pasado, pero la aparición de elementos alternativos como la eSIM plantea nuevas posibilidades de futuro a los dispositivos móviles.
La eSIM o SIM electrónica, presentada por la Groupe Speciale Mobile Association (GSMA) la semana pasada, es un chip similar al que incorporan las SIM en su interior que se inserta directamente en los dispositivos. A diferencia de la SIM, no es accesible por el usuario ni intercambiable, por lo que la información cargada en ella -como la relativa al dispositivo o a la operadora- se modifica digitalmente.
Según la GSMA, integrada por operadores, fabricantes de tarjetas SIM y de terminales, el nuevo estándar de tarjeta eSIM permitirá a los clientes conectar sus dispositivos equipados con esta tecnología de una manera segura, interoperable y rápida, a la vez que mantienen en todo momento la capacidad de elección de operador.
La eSIM se implantará primero en wearables y otros dispositivos conectados. Posteriormente, aunque este mismo año, llegará a los teléfonos inteligentes. Una de sus ventajas es que permite “añadir una nueva generación de dispositivos a su suscripción móvil”, según la GSMA. Indudablemente, el desarrollo del Internet de las Cosas es clave en la implantación de la eSIM.
El plazo de tiempo entre el anuncio de la GSMA y la aparición de los primeros dispositivos con el nuevos sistema será breve. Samsung ya tiene listo un dispositivo con eSIM, el smartwatch Samsung Gear S2 Classic 3G, que se lanzará en Alemania en el segundo trimestre.
Con motivo del Mobile World Congress, Telefónica ha mostrado en su stand distintos casos de uso de la eSIM para diferentes tipos de dispositivos de consumo, entre ellos terminales móviles y wearables. La operadora “cree firmemente en la capacidad de la eSIM para actuar como un catalizador que brinde conectividad a los miles de millones de dispositivos conectados que se esperan debido al fuerte crecimiento del Internet de las Cosas”.