¿Es Bitcoin un arma para los terroristas?
El Gobierno de EEUU considera Bitcoin una posible amenaza de tipo financiero, al incrementar la opacidad y velocidad de las transacciones de los terroristas.
Desde su popularización, la moneda virtual por excelencia se ha convertido en centro de polémicas. Defendida por unos como el instrumento para liberar la economía de la bota de las grandes instituciones financieras, Bitcoin es denostada por otros como una herramienta para el cibercrimen, el blanqueo de capitales y el crimen organizado. Ahora parece que también es un instrumento propio de terroristas, según Estados Unidos.
El Departamento de Defensa de EEUU está estudiando las posibles implicaciones del uso de Bitcoin en la política de seguridad del país, valorando la posibilidad de que la moneda virtual suponga una amenaza terrorista, informa TechSpot.
La Combating Terrorism Technical Support Office (CTTSO) ha puesto en marcha un programa en el que pide al sector privado “soluciones imaginativas para hacer frente a los nuevos desafíos”.
La oficina del Gobierno estadounidense afirma: “La irrupción de las monedas virtuales posiblemente configurará una amenaza de tipo financiero, al incrementar la opacidad, la velocidad de las transacciones y la eficiencia general de los ataques terroristas”.
Por ello, la CTTSO se teme que el uso de Bitcoin y otras monedas virtuales facilite el movimiento de capitales que se usen para financiar atentados, puesto que permiten transferir cualquier cantidad de dinero en unos segundos sin que se pueda conocer la identidad del emisor ni la del destinatario. En este sentido, recuerdan que en octubre del año pasado, el FBI cerró Silk Road, un mercado negro electrónico en el que se compraban drogas, armas y muchos más productos ilegales, y que sólo aceptaba bitcoins para los pagos.
Además de Bitcoin y otras monedas virtuales, la lista de temas de investigación relacionados con el terrorismo de la CTTSO también incluye a Android, Motorola, elementos de realidad virtual y medios de comunicación social.