Entra en servicio el primer enlace óptico de 400 Gbps por longitud de onda
Con un ancho de banda cuatro veces superior al de los sistemas actuales, esta conexión entre París y Lyon es obra de Orange y Alcatel-Lucent.
La compañía de telecomunicaciones France Telecom-Orange y el fabricante Alcatel-Lucent han conseguido establecer la conexión a Internet más rápida del mundo.
¿Su velocidad? 400 Gbps por longitud de onda en una red con tráfico real. ¿Y su campo de acción? Entre París y Lyon, las dos mayores áreas económicas de Francia, esto es, unos 450 kilómetros de distancia.
Dicho enlace utiliza la tecnología de fibra óptica Photonic Service Engine que ya está disponible en el mercado como solución comercial. Según los datos oficiales, consta de 44 longitudes de onda y es capaz de transferir 17,6 Tbps de tráfico total.
Todo esto quiere decir que es cuatro veces más potente que la anterior conexión entre ambas ciudades.
El primer cliente en probar la funcionalidad de este desarrollo tecnológico en condiciones reales para enrutar el tráfico será RENATER, el Grupo de Interés Público que gestiona la Red Nacional de Telecomunicaciones para la Tecnología, la Enseñanza y la Investigación.